El Club Náutico de Raxó tramita las autorizaciones para sacar adelante un proyecto que incluirá la creación de un nuevo local social para el club y 300 plazas de amarre en el puerto. El presidente del colectivo, José Cándido Dasilva, cifró ambas actuaciones en un presupuesto aproximado de 1,5 millones de euros.

En la actualidad el club tiene su sede en una oficina alquilada en el propio puerto. El objetivo de la asociación es contar con un inmueble propio en el que desarrollar sus actividades. Aunque la ubicación definitiva todavía no ha sido decidida, desde el colectivo apuestan por una parcela ubicada en el entorno de una antigua fábrica en ruinas, que se encuentra en el último tramo del muelle. "Pensamos que este terreno es de los concellos de Poio y Sanxenxo, donde habían construido una pequeña caseta con el objetivo de utilizarla para instalar una bomba de depuración. Sin embargo, nunca se llegó a utilizar", continuó Dasilva.

La dimensión de la parcela se aproxima a los 650 metros cuadrados, por lo que además del local social contaría con un espacio destinado a aparcamiento. "No queremos hacer un local demasiado grande. Pensamos en unas instalaciones en las que ubicar una pequeña oficina, un aula y un pañol para la escuela de vela y los marineros. El resto del espacio se dedicaría a aparcamiento para los socios", continúan los responsables del Náutico de Raxó.

Esta actuación se completará con la instalación de un pantalán flotante en el último tramo del puerto con 300 plazas de amarre. Para ello el proyecto contempla la colocación de una barrera de hormigón flotante que actuará como rompeolas, una base de pilotes de madera, una plataforma de madera y las líneas de pantalán.

La creación de esta estructura permitirá ordenar la playa, ya que en la actualidad las embarcaciones de los 140 socios del club ocupan unos 10.000 metros cuadrados de lámina de agua en el frente marítimo de Raxó. Con la instalación de los pantalanes los responsables del Náutico estiman que la superficie ocupada se reduciría a 6.900 metros cuadrados y se ubicaría en uno de los laterales de la zona marítima del puerto.

El club ha mantenido recientemente una reunión con los responsables de Portos de Galicia para iniciar la gestión de permisos y autorizaciones. "Quedaron en darnos una respuesta en 2 o 3 semanas para saber cual sería la fórmula más idónea para agilizar la consecución de permisos para la instalación de los pantalanes", continuó Dasilva.

El objetivo de los socios es comenzar el proyecto con la creación de las nuevas estructuras de amarre, algo que plantean financiar con las aportaciones de los propios socios. "Hicimos cuentas y las plazas saldrían a un precio razonable como para que las afronten los propios socios, por lo que inicialmente no contemplamos la búsqueda de financiación en las administraciones", concluyó el presidente del club.