La mañana de ayer se convirtió en una gran fiesta religiosa en la Basílica de Santa María la Mayor y en sus inmediaciones. Varios centenares de devotos procedentes de lejanos puntos del mapa gallego se acercaron al templo pontevedrés para participar en la liturgia de la Misa Jubilar, uno de los eventos más importantes del año en la ciudad del Lérez.

Hasta seis autocares repletos llegaron a la capital provincial desde el Arciprestazgo de A Terra Chá, en la provincia de Lugo. Portando los iconos de Nuestra Señora de Los Milagros, de Saavedra, y de Nuestra Señora de Los Desamparados, de Os Vilares, los peregrinos de Vilalba y Guitiriz disfrutaron de la soleada mañana que les ofrecían ayer las Rías Baixas.

Junto a ellos, otros dos autobuses desembarcaron desde la provincia de A Coruña. Concretamente, los feligreses llegaron desde el Arciprestazgo de A Maia.

Todos ellos compartieron el acto principal del día, la Misa Jubilar, que se vio complementada por el encuentro entre las gentes que pudieron departir en Pontevedra, con el enriquecimiento cultural y personal que ello trajo consigo.

En la tarde de hoy continuarán los eventos religiosos en Santa María. En este caso, los peregrinos llegarán desde Ourense, con la imagen de los Milagros arropada por sus devotos y sobre una lucida carroza. Una procesión recorrerá el entorno de la Basílica a partir de las cinco y media de la tarde, recorriendo las calles Amargura, Isabel II, Charino y Doña Teresa para regresar a Santa María.

A las siete se celebrará una nueva Misa Jubilar, que en este caso contará con la presidencia de Monseñor Luis Quinteiro Fiuza, obispo de Ourense.

Los actos concluirán con una veneración a la Virgen y una vistosa procesión de antorchas como despedida.