El tramo de la Autopista del Atlántico Pontevedra norte-Pontevedra sur, que incluye el puente sobre la ría, se ha convertido en uno de los más utilizados de toda la AP-9. Aunque sin llegar a los números de Rande y las proximidades de Vigo, donde se superan con creces los 55.000 vehículos diarios, el tramo pontevedrés ha visto como se duplicaban sus cifras de circulación en apenas ocho años. Si en el año 2000 se calculaba que pasaban cada jornada por el puente de la ría 25.368 vehículos, cuatro años después, en 2004, este punto experimentaba un espectacular incremento del 60%, al alcanzar los 40.389 coches diarios. A_día de hoy, se calcula que la intensidad media diaria (IMD) es de unos 48.500 automóviles, al menos un diez por ciento de ellos, pesados.

Esta elevada cifra de tráficos significa un notable origen de ruidos, según se detalla en un estudio encargado por la propia empresa concesionaria sobre este problema de contaminación acústica. El documento detalla que en Pontevedra, Poio y Vilaboa, existen unas 23.000 personas afectadas por un exceso de decibelios, 16.400 de ellas en el municipio capitalino, otros 2.400 en Poio y 4.200 en Vilaboa. En concreto, señala que 13.400 habitantes de Pontevedra sufren ruidos de más de 55 decibelios, otros 2.300 en Poio y 3.400 en Vilaboa. Por encima de los 65 decibelios existen 2.900 vecinos de la capital, cien en Poio y 800 en Vilaboa, mientras que ruidos más elevados, de más de 75 decibelios, son los que soportan 100 personas más, todas ellas en Pontevedra.

Edificios muy próximos

Aunque el estudio no precisa el lugar exacto, todo apunta a que esta contaminación acústica excesiva se produce en el tramo elevado sobre los edificios de Mollabao. De hecho, el informe describe que "a la altura de la localidad de Pontevedra, el eje viario discurre próximo a numerosas edificaciones, en su mayoría bloques de edificios de varias alturas. En el paso de la autopista por la ciudad cabe destacar la presencia del viaducto sobre la ría, de una longitud aproximada de 700 metros desde el que se observan las edificaciones situadas a la misma cota o ligeramente inferiores de la calzada".

Las cifras de circulación suponen que la AP-9 en el casco urbano de Pontevedra (este tramo discurre en medio de zonas muy pobladas y atraviesa la zona de Mollabao) registra el doble de tráfico que la media de toda la autopista gallega que, según la propia Audasa era de 27.030 coches en 2007. El tramo Pontevedra norte-Pontevedra sur es gratuito y funciona como una circunvalación del casco urbano, de ahí su alta utilización, que desemboca en muchas ocasiones en retenciones en sus salidas, especialmente en la del nudo de Bomberos. Por ello, la Consellería de Política Territorial pretende dotar a esa zona de un carril adicional que permite resolver las largas colas de coches que se acumulan en plena autopista para salir por ese nudo.

Más carriles

Sin embargo, la Xunta descartó otro proyecto más ambicioso y complejo, ampliar al menos hasta los seis carriles todo el trazado del puente de la ría, desde ese nudo de los Bomberos hasta el de Salcedo. La oposición municipal, que calificó de "muy impactante sobre la ciudad" este proyecto, llevó a reducir la iniciativa y dejarla en una pequeña ampliación en la zona de A Barca. En cambio, el concello sí que presiona a la Xunta y, especialmente al Ministerio de Fomento para que adopten medidas con respecto al nudo de Bomberos, bien remodelándolo por completo o bien creando una nueva salida de la AP-9 unos kilómetros más al norte, que reduzca la saturación en la zona.

Un análisis de las IMD por tramos de la AP-9 en la comarca ponen de manifiesto que el nudo de Bomberos es uno de los más utilizados, ya que al sur de Pontevedra, en el tramo hasta Vilaboa, se registran unos 40.000 coches diarios, pero hacia el norte, desde la capital hasta Santiago, el uso es mucho menor, por debajo de los 26.000 coches, lo que significa que al menos 12.000 coches salen cada día por el nudo de A Barca. Una cantidad menor lo utiliza como acceso a la AP-9.