Piden más de 9 años de cárcel para un conductor a la fuga que hirió a 3 agentes y dañó vehículos policiales

Se empotró contra el coche de dos funcionarios e impactó contra la moto de otro, al que derribó | Se negó a la prueba de alcoholemia

El encausado conducía por el barrio de Covadonga cuando le dieron el alto.

El encausado conducía por el barrio de Covadonga cuando le dieron el alto. / I. OSORIO

J. F.

El Juzgado de lo Penal 1 de Ourense juzga este mes a un hombre de 34 años, con numerosas detenciones previas y con antecedentes penales, que en esta ocasión se enfrenta a más de 9 años de prisión por una sucesión de delitos, tras huir de un control policial y conducir de forma temeraria por varias calles de Ourense, con un saldo de tres agentes lesionados y un vehículo y una moto oficiales, de la Policía Nacional, con importantes daños.

El encausado fue condenado en 2015 en Pontevedra por conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas y por una negativa a realizar las pruebas de alcoholemia. En este último delito es reincidente en los hechos por los que va a ser juzgado dentro de unos días.

El 6 de septiembre de 2019, sobre las 20.05 horas, circulaba en un automóvil sin seguro por la calle Júpiter de Ourense, procedente de la plaza de Covadonga. Un agente uniformado le requirió que se identificase, y otro le indicó que se bajara del vehículo. Presuntamente, no obedeció, dio marcha atrás, desoyó a uno de los agentes, que le reiteró que se detuviera, y procedió a acelerar bruscamente para huir. Un policía se colocó en medio de la vía para darle el alto, pero el conductor aceleró todavía más, obligando al agente a apartarse para no ser arrollado, según sostiene la Fiscalía.

Dos agentes que iban de paisano en un vehículo camuflado realizaban labores de apoyo, bloqueando la vía con el automóvil. El ministerio público señala que el encausado colisionó contra el vehículo oficial en su propósito de escapar. Los dos policías sufrieron contracturas cervicales –tardaron en recuperarse 35 y 100 días–, y el automóvil del cuerpo registró unos desperfectos valorados en 2.323,09 euros.

Un inspector salió despedido y quedó postrado en el suelo

Cuando un agente se acercó al coche del encausado y golpeó su ventanilla, él presuntamente metió la marcha atrás y el funcionario tuvo que apartarse para no ser alcanzado. De forma intencionada, según la Fiscalía, invadió la trayectoria de una motocicleta policial e impactó contra ella, provocando un fuerte golpe en la rodilla derecha a un inspector que salió despedido y quedó postrado en el suelo.

Los daños en la motocicleta fueron cuantificados en 3.520,50 euros. El policía sufrió un desgarro de los meniscos y una contusión en la rodilla derecha, así como un esguince y torceduras que comprometían los ligamentos cruzados, además de traumatismos superficiales de la muñeca y de la mano. El inspector tardó en curarse 180 días, y le han quedado secuelas, según consta en autos.

Dos vehículos de la Policía entrando en el juzgado de Ourense.

Dos vehículos de la Policía entrando en el juzgado de Ourense. / F. CASANOVA

Tras derribar al inspector, siguió marcha atrás a gran velocidad, efectuó un semigiro y continuó con la huida. Fue perseguido por los agentes por varias calles de los barrios de O Vinteún y A Ponte. Según la Fiscalía, el encausado llevó a cabo “una conducción a una velocidad elevadamente desproporcionada para la vía”, saltándose semáforos, subiéndose a la acera y poniendo en peligro a las personas que estaban en la calle. Los agentes desistieron de la persecución por el peligro existente para terceras personas.

Un agente fuera de servicio que se encontraba en un a terraza vio cómo el encausado llegó a circular por encima de la acera, por la que caminaba una menor de unos 13 años, a la que puso en peligro. Tras saltarse un semáforo en rojo circuló también en dirección prohibida.

Sobre las 21 horas fue localizado en el exterior de una parrillada. Ya en la comisaría, fue requerido sobre las 22.45 horas para que hiciera las pruebas de alcoholemia. Presuntamente se negó. Según los agentes presentaba síntomas de embriaguez como apatía, agotamiento, vestidos sucios y con olor a alcohol, rostro congestionado, conjuntiva enrojecida hemorrágica, pupilas algo dilatadas, comportamiento desinhibido, habla pastosa, halitosis alcohólica notoria a distancia y muy fuerte de cerca, falta de conexión lógica en las expresiones y movimiento oscilante de la verticalidad del cuerpo.

Una sucesión de delitos

Por un delito de conducción temeraria, la Fiscalía solicita 1 año y 8 meses de prisión más 4 años del privación del derecho a conducir. Pide 3 años y 6 meses de prisión por un delito de atentado, en concurso con un delito de lesiones, más 1 año de prisión y 3 años y medio sin poder conducir por el delito de negativa a la alcoholemia. Por otros dos delitos de lesiones, la Fiscalía solicita un total de 3 años de cárcel. Y por un delito continuado de daños, el acusado se enfrenta a una multa de 7.200 euros.

Indemnizaciones

El ministerio público quiere que el encausado, con responsabilidad solidaria del consorcio de compensación de seguros y subsidiaria del propietario del vehículo conducido por él, indemnice con más de 10.500 euros al inspector, 1.040 a otro de los agentes heridos, 3.940 al tercero, 3520,50 al consorcio de seguros, más 2.323,09 euros por los daños en el coche de los dos agentes.

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