La circulación entre provincias sigue estando prohibida sin causa justificada. Pero hay quienes emprenden este tipo de viajes por las causas más peregrinas. En la madrugada del domingo, la Guardia Civil detectó en Ourense a un motociclista procedente de Madrid que dijo que su intención era instalarse en Galicia tras separarse de su pareja.

A las 3 horas de la madrugada del domingo, tras un control en el kilómetro 235 de la N-525, a los agentes les llamó la atención el motero, que portaba equipaje, lo que sugería un viaje de largo recorrido. Es un hombre de 51 años con domicilio en Madrid que, al ser preguntado por el motivo del desplazamiento, alegó que venía de directamente de la capital y buscaba dónde pernoctar.

Los agentes percibieron signos compatibles con consumo de drogas: dio positivo en THC en el test. Si el laboratorio lo confirma, se enfrenta a multa de 1000 euros y 6 puntos del carné, además de la sanción por saltarse las restricciones de viaje del estado de alarma. Esa misma noche, la Guardia Civil detectó 4 positivos más en drogas, así como otro en alcohol.