Tres hombres con edades comprendidas entre los 22 y 65 años se sentaron ayer en el banquillo por haber dañado presuntamente en un total de seis ocasiones la misma cancilla de un vecino de Entrimo, en un plazo de dos meses, entre marzo y abril de 2015. Actuaron siempre de madrugada. Según el fiscal, con el objetivo de menoscabar el libre derecho a la propiedad del perjudicado, pese a que le había sido reconocido en una sentencia dictada por el juzgado de Bande en 2014. Tras perder el pleito se tomaron la justicia por su mano. Los acusados niegan los hechos y la defensa solicita la libre absolución.

El fiscal enumera seis acciones que atribuye a los tres hombres en su escrito de acusación. La primera es del 8 de marzo de 2015. Presuntamente, a las 4 de la madrugada, uno de los imputados se dirigió en su vehículo, cogió una cizalla, fracturó el candado de la cancilla del vecino y sacó la cadena que cerraba el paso a la zona cimentada entre la vivienda y un bar funeraria propiedad del perjudicado, que tuvo que reemplazar el cierre.

A las 3 de la madrugada siguiente, los tres forzaron presuntamente la cerradura de nuevo. Sobre las 2.30 horas del 13 de marzo, los tres habrían regresado para destrozar la cerradura que había sido sustituida por los daños previos. El 9 de abril de 2015, uno de ellos habría empleado un gato hidráulico para forzar los barrotes y la cerradura. La madrugada siguiente habría regresado de nuevo causando desperfectos. El último hecho es de las 3 del 14 de abril. El mismo imputado cortó presuntamente los barrotes. El perjudicado tuvo que cambiar la cancilla. Los daños totales son más de 800 euros que tendrán que abonar en caso de condena. Se enfrentan a 2.700 euros de multa por daños, o a 3.420 por coacciones.