El conjunto monacal de San Pedro de Rocas, ubicado en la parroquia de Rocas de la localidad ourensana de Esgos, goza desde hace casi 100 años de una denominación reservada a inmuebles nacionales con una historia e importancia de peso. El 20 de septiembre de 1923, el monasterio y sus entornos fueron declarados monumento histórico-artístico, justo una semana después de que la dictadura de Primo de Rivera se instalase en nuestro país.