El expresidente de la Diputación de Ourense, José Luis Baltar Pumar, también realizó enchufes de personas procedentes de "territorio hostil", donde gobiernan miembros del denominado PP histórico, que apoyaron en el congreso provincial del PP de 2010 al candidato alternativo, Juan Manuel Jiménez Morán, que competía con su hijo Manuel Baltar Blanco.

Aunque fuera por despiste o a regañadientes, en la relación de contratos realizados durante el mandato de José Luis Baltar consta que proporcionó empleo a un cargo del PP en Arnoia, donde estaba al frente de la alcaldía el ahora delegado territorial de la Xunta, Rogelio Martínez. En este caso, la agraciada fue Elvira Fariñas Álvarez, mujer de un concejal.

Verín

En Verín, feudo del regidor y excandidato alternativo en cuestión -considerado "hijo político de Baltar", hasta que perdieron afinidad-, Juan Manuel Jiménez Morán, aporta cuatro operarios a la Diputación: Rosa Carrajo, perteneciente a la ejecutiva local del PP; Sonia Contreras, también de la ejecutiva; Ana María Gago Laza, igualmente de la ejecutiva local; y José Luis Rivera Rodríguez, candidato a concejal.

El Concello de Viana, también con un regidor popular contrario a los intereses sucesorios de José Luis Baltar, cuenta con una sola persona contratada, Juan Carlos Prieto García, hijo de un exregidor.

Y Leiro, concello gobernado por el regidor y ahora senador Francisco José Fernández Pérez, solo aporta dos contratos, correspondientes a Ramón Ferreiro Chao, candidato a concejal; y a José Luis Sobrino Rodríguez, concejal.

Maside y Piñor

Maside, un concello gobernado por un alcalde socialista, cuenta con dos representantes: Carmen González Rodríguez, mujer de un concejal del PP, y Gena Prieto Álvarez, candidata a concejala.

Aunque resulte chocante, el concello socialista de Piñor aporta nada menos que cinco operarios contratados en la Diputación -todos ellos pertenecientes al PP-, que son José Cibeira Rodríguez, exconcejal; Rocío Fernández Ada, concejala; Manuel Fernández González, padre de una concejala; Yago González Rodríguez, hijo de un concejal; y José Luis Rodríguez Fernández, candidato a concejal.

Ribadavia, un concello mucho más populoso, que también cuenta con alcalde socialista, contribuye con cinco modestos contratos: Julia Estévez Durán, candidata a concejal por el PP; María Luz Expósito Pérez, sobrina de un exconcejal del mismo partido; Juan Carlos Fernández Fernández, concejal popular; María Martínez Abal, candidata a concejal; y Celso Sotelo,hijo de un exconcejal del PP.

En cambio, como el regidor de Vilamarín y exportavoz del grupo de gobierno de la Diputación, Amador Vázquez, es de la cuerda de Baltar, ahí ya abrió un poco la mano -a pesar de que se trata de un municipio con 2.175 habitantes- y realizó nueve contrataciones. Se incorporaron a la plantilla del Pazo Provincial o entidades dependientes Anselmo Boimorto Falcón, hermano de un concejal; Levi Efrén Caballero Vázquez, yerno del alcalde; Lucía Dacal Pavón, concejala; Raúl Estévez González, candidato a concejal; José Ramón Guzmán Rodríguez, candidato a concejal; Amalia López Blanco, candidata a concejala; Manuel Mera González, hermano de una candidata; Floreano Rodríguez Cortés, concejal; y Guadalupe Ucha Nóvoa, hermana de una candidata a concejala.

Y el diminuto concello de A Teixeira suma siete puestos. Los beneficiarios son Eugenio Álvarez González candidato a concejal; David Álvarez López, sobrino de una concejala; José Ramón Álvarez Lorenzo, hijo de un candidato a concejal; Samuel Carballo Fernández, candidato a concejal; Alfredo Domínguez Gómez hermano de un candidato a concejal; Ramiro Domínguez Gómez, concejal del PP; y Julio González Feijóo, candidato a concejal.