Un hombre de 60 años fue detenido ayer en la calle Ramón Puga de la ciudad por provocar daños en el escaparate de una pastelería con una azada. Este suceso sorprendió a los viandantes y a los propios agentes, ya que se desconoce el motivo que llevó al detenido a salir de su casa con una azada y arremeter contra el escaparate de la confitería del número 44 de Ramón Puga. De hecho, M.G.G. no realizó ninguna declaración aclaratoria a la policía.

Los hechos ocurrieron a las 14,50 horas, cuando el establecimiento estaba cerrado. Los agentes recibieron el aviso de que un hombre estaba causando daños en el escaparate y se trasladaron al lugar, donde un ciudadano estaba sujetando al detenido, que portaba una azada.

Según declaró después a la patrulla, este ciudadano se decidió a agarrarle para impedir que siguiese destrozando el local y con el riesgo de ser golpeado también. A causa de ello fue amenazado de muerte por el detenido, que llegó a proferir dichas amenazas en presencia de los agentes.

A partir de estos hechos, los agentes procedieron a la detención de M.G.G., que fue trasladado a dependencias policiales en espera de prestar declaración ante el juez. Los daños en el cristal de seguridad están valorados en 700 euros.