La heráldica es una ciencia auxiliar de la historia que estudia los blasones. Podemos distinguir dos grandes apartados dentro de ella, la civil, siempre relacionada con la monarquía y la nobleza, además de las armas de ciudades y villas, y la eclesiástica, que también tiene dos partes, la de instituciones como catedrales y monasterios y la personal que se refieren a los eclesiásticos con derecho a usar escudo, que son principalmente los cardenales arzobispos obispos abades y otros jerarcas. La heráldica tiene al mismo tiempo valor ornamental y por eso la estudia la historia del arte y los historiadores porque los escudos suelen declarar mecenazgos, patrocinios de edificios y de obras y cuando se colocan en el sepulcro permiten la identificación del personaje cuando no lo hacen inscripciones o letreros. Desde hace años reúno datos sobre la heráldica de los obispos de Ourense y de alguno de ellos como de Monseñor Temiño he publicado el catálogo de sus escudos; en este caso quiero hacerlo de uno de los obispos de Ourense de más prestigio, cuyo paso marcó a la diócesis para bien, de sólida formación y decidido carácter se empeñó en muchos proyectos de importancia y es en ellos principalmente a donde dejó su escudo episcopal, la señal de su interés generoso o de su responsable gobierno. Por supuesto el escudo se repite innumerablemente en la documentación, como sello seco sello, de tinta o membrete impreso pero naturalmente no es a este campo al que nos vamos a referir. Es también de interés el conocer la autoría de todos los escudos que vamos a catalogar.

El obispo Ilundain. Eustaquio Ilundáin Esteban nació en Pamplona el 20 de noviembre de 1862 y fallecería en Sevilla el 10 de agosto de 1937. Brillante en sus estudios, se ordenó sacerdote en 1886 y comenzó su carrera como canónigo en Ciudad Real y Segovia; fue preconizado obispo de Ourense el 14 de noviembre de 1904, entrando en la ciudad el 2 de abril de 1905. Durante 15 años de fecundo pontificado renovó el Seminario, se preocupó del clero con provechosas determinaciones, celebró sínodo diocesano, fue generoso con la Catedral y como veremos por su heráldica, su interés se hizo eficaz en el campo social y del patrimonio. El 16 de diciembre de 1920 fue preconizado arzobispo de Sevilla. En el consistorio de 30 de marzo de 1925 fue creado cardenal del título de San Lorenzo in Panisperna y en Sevilla también con intensas actuaciones. Fallecería como he dicho en 1937. Tuvo en su secretario un minucioso biógrafo L. Tovar González, Ensayo biográfico del Emmo. Sr. Cardenal Ilundáin y Esteban, obispo que fue de Orense y arzobispo de Sevilla, Pamplona, Aramburu, 1942. Y yo he historiado su etapa auriense en M. A. González García, "La diócesis de Orense desde 1850", en, Historia de las Diócesis Españolas, 15. Iglesias de Lugo, Mondoñedo-Ferrol y Orense, Madrid, Biblioteca de Autores Cristianos, 2002, págs. 567-573;

El escudo. La armería eclesiástica tiene sus reglas y aunque debería someterse a las reglas generales con frecuencia las altera ya que en los cuarteles pueden figurar las armas familiares si el prelado tiene derecho a ellas por su estirpe, y cuando no son las llamadas armas de devoción muy abundantemente en la heráldica episcopal, que hacen referencia a vinculaciones y devociones del obispo. El escudo se timbra con Capelo que cambia de color y de número de borlas según la dignidad del eclesiástico, para obispo de color verde y con tres filas de borlas colgando a los lados, nuestro obispo al pasar a Sevilla le añadió una cuarta fila y al ser nombrado cardenal una quinta. Además suelen acompañar al escudo la cruz con uno o dos brazos según la dignidad y la mitra y el báculo, modernamente se prescinde de estas insignias, a mi modo de ver de modo equivocado, y se completa con una filacteria donde figura el lema del obispo con alguna frase evangélica o algún pensamiento que quiere ser orientador de su pontificado. También cuando al eclesiástico se le han concedido condecoraciones ya civiles o eclesiásticas puede representarlas en sus armas. Don Eustaquio tiene un escudo partido, claramente devocional, ya que en el campo izquierdo hay una evocación de su patria, Navarra, y en el derecho de su devoción mariana. Es él mismo quien lo explicó en la alocución que dirigió al llegar a Ourense en la catedral. "Mis propósitos están condensados en el escudo de armas que he escogido. El león rampante y las cadenas que figuran en uno de sus cuarteles representan la fortaleza en la fe que animó a los navarros en la memorable batalla de las Navas de Tolosa, y la cual ansío yo tener hasta exhalar en el último suspiro. En el otro cuartel está el monograma de María y por debajo aquellas palabras Benedictisimas dirigidas por el arcángel Gabriel a nuestra madre querida, para anunciarle la Encarnación del verbo: "Ave María". Coronándolo todo y como llenándolo y abarcándolo todo aparece el corazón Dulcísimo de Jesús símbolo augusto del amor." Lema Omnia honeste et secundum ordinem fiant." Tomado de I Corintios, 14, 40 Que todo se haga decentemente y con orden. (Boletín Oficial del Obospado 1955 y Tova.r pg 37). Los colores, si son exactos los de la vidriera de Xunqueira, van ambas particiones en campo de azur (azul) lo que heráldicamente no es muy ortodoxo.

Los escudos

Seminario. El actual edificio del Obispado fue la noble ampliación que Ilundain encomendó al Arquitecto Queralt. En la escalera de honor se colocaron dos inscripciones en latín con datos históricos del Seminario y en el centro un gran escudo del Obispo en madera policromada. Las lápidas se conservan, el escudo desgraciadamente no. Lamentable desprecio no infrecuente por la historia. Porque además era una talla de los acreditados Hermanos Rodríguez como certifica la Factura de 25 de octubre de 1907 de Fábrica y almacén de Muebles de lujo Antonio Rodríguez. Por la talla del escudo de madera del Obispo Ilundain que se colocó en la Escalera su coste fue de 800 pesetas. Estaba policromado y se acompaña el recibo de 29 de enero de 1908 de 160 pesetas pagadas al pintor Jesús Soria por ello. Los Hermanos Rodríguez, Antonio y Celso, alcanzaron el máximo prestigio como fabricantes de muebles con decoraciones neorrenacentistas. Y Jesús Soria, pintor y profesor del Instituto tendrá también grandes reconocimientos sobre todo como retratista (GONZÁLEZ GARCÍA, Miguel Ángel, Las obras de reforma interior del Seminario de Ourense realizadas en el Pontificado del Obispo Don Eustaquio Ilundain (1905-1908). Apunte documental DIVERSARUM RERUM nº 11, Ourense, 2016 pgs 209-226)

Centro Católico de Obreros. El Centro católico de Obreros era un singular edificio promovido por el Obispo Ilundain en el Paseo, obra del arquitecto Daniel Vázquez que realizó una obra de carácter clasicista muy curiosa e interesante y también lamentablemente desaparecida, coronaba la fachada una especie de peineta en la que se insertaba el escudo del Obispo Ilundain cuando se destruyó el edificio, el escudo al menos se recogió y está en lo que era la huerta del palacio episcopal hoy museo Arqueológico Provincial aún que quizá del modo provisional en el que se depositó, es de piedra y va firmado por Piñeiro. Además conozco el recibo del mismo del año 1910: "FRANCISCO PIÑEIRO. Grandes talleres de mármol se hace toda clase de trabajos Alameda Orense. Debe El Ilustrísimo señor Obispo de por un escudo de piedra de Novelda para la casa del Centro católico de obreros de Orense la cantidad de 300 pesetas. Recibí Francisco Piñeiro" (ACO 581/3)

Asilo Sacerdotal. El actual y elegante edificio de la subdelegación militar de Orense en el Paseo lo empezó a construir el Obispo don Pascual Carrascosa para destinarlo a casa de Acogida de sacerdotes ancianos. Posteriormente el Obispo Ilundain lo terminó, pero ya no se le dio ese destino, sino que lo comenzaron ocupando los HH Maristas con un colegio que abrían entonces. En la fachada se colocaron los escudos de ambos obispos y allí siguen. Son también obra del acreditado escultor y marmolista Piñeiro. El recibo de los mismos, de 4 de febrero de 1911, dice: "FRANCISCO PIÑEIRO elaboración de toda clase de piedras. Grandes talleres de mármol se hace toda clase de trabajos Alameda Orense. Por dos escudos episcopales uno del señor don Pascual Carrascosa y el otro del doctor don Eustaquio Ilundain labrados en piedra Novelda (Alicante), dichos escudos están colocados en la casa de las escuelas y por ello recibí 600 pesetas. Francisco Piñeiro por colocar dos escudos en el asilo pague 25 pesetas." (ACO 581/2)

Xunqueira de Ambía. Tanto el Obispo Carrascosa como Ilundain tuvieron predilección por Xunqueira de Ambía donde el primero construyó un palacete de verano que posteriormente ocuparían los HH de la Salle y luego los PP.Mercedarios estando actualmente pendiente de un destino eficaz. Ilundain gustaba de pasar alguna temporada allí y eso le interesó eficazmente por obras en la Colegiata, la principal quizá fue dejar el ábside central libre trasladando el precioso retablo renacentista a la nave. Con esa ocasión renovó el altar y mobiliario del presbiterio y en los ventanales colocó tres vidrieras que se encargaron en León, el recibo de las mismas es de 5 de junio de 1911 importando 210 pesetas. Las vidrieras son tres y se conservan actualmente correspondiendo claramente a este encargo ya que en la central figura el escudo del Obispo Ilundain, en la izquierda una representación de San Eustaquio nombre del obispo y en la tercera San Martín obispo de Tours y patrono de la diócesis. En estos años primeros del siglo XX, en León trabajaba en la restauración de las vidrieras catedralicias y sabemos de encargos para diversos sitios el vidriero Guillermo Alonso Bolinaga y su taller y creo que estas son suyas. (AHDOURENSE 941/04)

Iglesia de As Caldas. As Caldas era entonces ayuntamiento independiente de Ourense, pero con la construcción del ferrocarril creció mucho y por ello hubo de construirse una iglesia encargada al arquitecto Basterra, que desgraciadamente quedó inacabada, siendo el promotor de toda ella nuestro Obispo Ilundain que también encargó al escultor quizá más importante de Galicia entonces Maximino Magariños Rodríguez el retablo mayor de estilo neogótico, contratado el 24 de enero de 1919 e inaugurado el 28 de noviembre de 1920. En la base del mismo se colocaron en relieve de madera dorada los escudos del papa reinante Benedicto XV (1914-1922) y del Obispo Ilundain sirviendo como memoria del promotor y cronología de la obra.