El Sergas licita un contrato urgente para las ambulancias y el personal retoma la huelga

Los sindicatos se levantaron de la reunión de ayer con el Sergas y 061

Acusan a la Xunta de no intervenir a la empresa en “bancarrota”

Sanidade llama a la responsabilidad

Ambulancia del 061 en Cangas, con ruedas pinchadas y pintada con alusiones al conflicto laboral. |   // FDV

Ambulancia del 061 en Cangas, con ruedas pinchadas y pintada con alusiones al conflicto laboral. | // FDV / Cristina González

Había esperanzas de que los trabajadores de Ambulancias do Atlánticoconcesionaria del servicio en Cangas, Moaña y Vigo— y el Sergas y la Fundación Pública Urxencias Sanitarias Galicia-061 llegaran, en la reunión de este jueves, a un acuerdo que pusiera fin al conflicto laboral por la supuesta situación de bancarrota de la empresa. Pero la representación sindical de CIG, CC OO y USO se levantó de la mesa de negociación y volverá a plantear la convocatoria de huelga (había desconvocado la del 2 y 3 de mayo mientras se negociaba) y a recrudecer el calendario de protestas en espera de una respuesta de la Xunta de la que dicen que se niega a asumir directamente el servicio de asistencia y transporte sanitario público.

Desde la Consellería de Sanidade piden responsabilidad a los representantes sindicales y ánimo constructivo ya que, como se les informó en la reunión que abandonaron, están ultimando la tramitación por la vía de urgencia de un nuevo contrato para garantizar la continuidad del servicio, mientras se diseña el pliego para una nueva contratación ordinaria y que, tras la renuncia unilateral del adjudicatario se tomaron medidas para que no se interrumpiera el servicio y garantizar el pago de las nóminas de abril.

Los trabajadores vuelven a incidir en que el empresario continúa desaparecido, no saben a quién dirigirse para el más mínimo acto administrativo o tareas logísticas como un permiso laboral o la reparación de un vehículo. Además, los documentos de las nóminas siguen sin entregarse haciendo imposible el cálculo para una posible reclamación judicial del dinero que se les adeuda, incluso mal hechas para colapsar los servicios jurídicos de los sindicatos, que tendrían que calcular, una a una, las nóminas de todo el año de los 260 trabajadores.

Contra esto, dicen que en la reunión solicitaron al Sergas que asuma la elaboración de las nóminas en su papel de interventor en la empresa: “Porén, négase, o que demostra unha nova mentira da consellería no seu compromiso de intervir a empresa”. Los tres sindicatos denuncian que la administración está realizando “un tímido papel de mero observador e que tan só lanza recomendacións ao empresario e a súa contorna”.

Mientras tanto, los trabajadores aseguran que las deudas a proveedores continúan acumulándose, en una situación de bancarrota de la empresa, haciendo muy complicado el trabajo diario, con restricciones de combustible, interrupción de limpieza en los centros de trabajo y falta de reparaciones en las ambulancias o impagos de alquileres.

Licitación por 6 meses prorrogables por otros 3

En la reunión, la Consellería de Sanidade informó, tal y como señalan los sindicatos, de los plazos para resolver la grave situación del servicio de transporte sanitario. Con respecto al servicio urgente, trasladó que este lunes 13 de mayo se llevará al Consello da Xunta el contrato de emergencia para que se publiquen los pliegos que permitan a las empresas licitar por un plazo de 6 meses prorrogable a otros 3. Según las estimaciones del 061, unha nueva empresa estaría prestando el servicio en Vigo,Cangas y Moaña desde el 1 de junio hasta el 30 de noviembre.

Los sindicatos dicen que la situación más grave ocurre en el servicio programado que el Sergas pretende continuar con Ambulancias do Atlántico como mínimo 4 meses más. Añaden que tienen pruebas de que los cálculos del coste de servicio para una nueva licitación están mal realizados por la “información facilitada por Ambulancias do Atlántico” y que el estudio de costes publicado por la consellería no incluye el gasto real de las nóminas del personal ni de los suministros. Por esta razón, sospechan que el contrato del servicio programado volverá a quedar desierto teniendo que prolongarse más tiempo al empresario Carlos Simón.

Los sindicatos se sienten molestos por las acusaciones del 061 responsabilizándoles de no tener paciencia, de no respetar la paz social y a los trabajadores de supuestos sabotajes. CIG, CC OO y USO manifiestan que si el servicio funcionaes gracias a la implicación y responsabilidad del personal sanitario de Ambulancias do Altántico y hacen responsable a la Consellería de Sanidade de no garantizar el cobro de salarios ni los atrasos al no haber supervisado la gestión de la empresa concesionaria.