Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La Xunta planea entregar el castro de Domaio al Concello para una gestión municipal

La maleza cubre los muros de varias de las estructuras sacadas a la luz durante la última excavación. | // SANTOS ÁLVAREZ

El yacimiento castreño de Montealegre, en Domaio, tiene las dos zonas excavadas listas para su visita desde el verano de 2020, pero desde entonces todavía nadie se ha encargado de su mantenimiento y la maleza lleva meses “comiéndose” las distintas estructuras que salieron a la luz con los trabajos realizados antes del desdoblamiento del antiguo Corredor do Morrazo y su conversión en una autovía. Desde el Concello señalaron que el problema está en que la Xunta no remitió el convenio comprometido para regular el mantenimiento y que se firmaría a tres bandas entre Patrimonio, la Comunidade de Montes de Domaio y la administración local.

La pasada semana la alcaldesa, Leticia Santos, remitió una carta a la directora xeral de Patrimonio Cultural, Carmen Martínez Insua, alertando del deterioro del ámbito excavado por falta de mantenimiento. Ayer, desde la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade explicaron que están valorando varias figuras para el que el Concello pueda gestionar el castro. Es más, incluso están evaluando la posibilidad de formalizar un cambio total de titularidad, para que el yacimiento datado entre el siglo I a.C. y el I d.C. pase a ser propiedad del Concello.

Antes de plantear esta medida, los técnicos de la Xunta están realizando una delimitación detallada del terreno, de modo que no interfiera en los elementos de la propia Autovía, que sí debe seguir siendo de la Xunta. Tan pronto como la propuesta se tenga definida se dará traslado al Concello.

La maleza acumulada salió a la luz el pasado julio, tras las quejas de la Asociación de Veciños de Domaio “Monte Faro”, que reclamaba la limpieza.

En concreto el castro de Domaio tiene dos zonas visitables. Se han puesto en valor las estructuras excavadas por Antón Losada Diéguez en 1925 y las realizadas en el año 2016 por el arqueólogo Miguel Vidal. La riqueza de las piezas descubiertas en esta fase, con más de 20.000 elementos de valor arqueológico además de cinco estructuras de viviendas y almacenes, llevaron a vecinos de Domaio a exigir a la Xunta un cambio en la autovía proyectada para no destrozar el castro. Finalmente, y tras la reclamación de los concellos de la comarca, Infraestruturas acometió una compleja y pionera ampliación por el interior del túnel de Montealegre, salvando las zonas excavadas, que se pusieron en valor entre 2019 y 2020 para hacerlas visitables.

Entre las piezas encontradas en la última excavación destaca una escultura antropomorfa de unos 60 centímetros de altura. Además de elementos de cerámica y de piedra se encontraron anzuelos de bronce, fíbulas de distintas formas para sujetar las capas y agujas para los recogidos del pelo confeccionadas en bronce y con una detallada ornamentación.

Quizá una de las partes más llamativas es la de un empedrado de acceso al núcleo del poblado, que se encontró prácticamente intacto.

Para hacer visitable el yacimiento la Xunta ha invertido 280.000 euros. Desde el Concello plantearon también la posibilidad de dotar al espacio de un guía que se encargue de explicar sus distintas partes a los visitantes. Hay que recordar que en los últimos trabajos se limpiaron y estudiaron los petroglifos, mucho más antiguos, presentes en la zona.

Los arqueólogos que trabajaron en la zona entienden que este poblado castreño llegó a albergar a unas 300 personas y su máxima extensión, a lo largo de toda la ladera de la montaña, ocupó unas 3 hectáreas.

Si el Concello pasa a ser el titular pleno del espacio deberá acordar con los comuneros el acceso por el Mirador da Fontenla, que en estos momentos ya cuenta con paneles explicativos en dos puntos. Este cambio solventaría problemas como la necesidad de que la administración local solicite un permiso de Patrimonio cada vez que quiera ejecutar alguna limpieza.

Compartir el artículo

stats