El cuartel de la Guardia Civil de Moaña tuvo durante todo el día de ayer una inquilina más. Se trata de una paloma mensajera que apareció golpeada en casa de un vecino de la parroquia de Tirán y que fue entregada a los guardias por un veterinario local. La paloma tenía un golpe en el pecho y presentaba una anilla en la pata en la que se podía leer "Portugal 2007".

El problema surgió cuando nadie se quería hacer cargo de este animal, que a última hora de ayer y en espera de ser recogido, seguía en una caja en las dependencias de la benemérita, bien alimentada, con pan y agua.

La Guardia Civil se había puesto en contacto con el centro de recuperación de aves de Cotorredondo con el fin de depositarla allí, pero en el propio centro le negaron tal posibilidad ya que sólo recogen especies autóctonas y salvajes. La Guardia Civil moañesa no desistió en su empeño de salvar al animal y se puso en contacto con una asociación de colombofilia de Cangas que aceptó recoger el animal. El compromiso era que un representante moañés del colectivo de aficionados acudiría a hacerse cargo del animal.