El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha concretado sus planes para ayudar al sector pesquero ante la escalada de precios provocada por la guerra en Ucrania. En concreto, la esperada ayuda para paliar el alza del coste del combustible y que dejó en vilo desde la semana pasada a armadores y cofradías. El Gobierno reducirá 20 céntimos por litro de combustible hasta el 30 de junio para los barcos de pesca, igualando la medida lanzada para todos los usuarios. Junto a ello, aplazan el pago de las cuotas a la Seguridad Social por tres meses.

La vicepresidenta primera del Gobierno de España, Nadia Calviño, concretó tras la reunión del Consejo de Ministros que la pesca tendrá un ayuda total de 68 millones de euros.

Según pudo confirmar FARO, la rebaja del precio del gasoil incumpliría la principal demanda lanzada desde el sector, que reclamaba igualar los 35 céntimos anunciados por Francia para su flota. De esta forma, habrá que ver qué decisión toman finalmente las cofradías, ya que como anunció la Federación Galega de Confrarías habría “medidas contundentes” si no se cumplían sus reclamaciones.

Las dos medidas concretadas se unan a las ya anunciadas por Planas al sector como la exención de la tasa portuaria para la pesca fresca, la línea de crédito del ICO SAECA o la aplicación del artículo 26 del Fondo europeo Marítimo, de Pesca y de Acuicultura (Fempa) que España peleó y consiguió ante la Comisión Europea.

Así, el régimen de ayudas directas que tendrá la flota ascenderá a 18,18 millones de euros, que oscilarán entre unos 1550,52 euros por buque (con un tonelaje bruto de menos de 25) hasta un máximo de 35.000 euros (buques a partir de 2.500 de tonelaje bruto).

En cuando a la ayuda del Fempa, será de un total de 50 millones de euros: 30 millones para compensar a los pescadores por los costes adicionales ocasionados y otros 20 millones de euros para la acuicultura.

Todas estas medidas se articularon dentro del Decreto Ley aprobado en el Consejo de Ministros, cuya cuantía general es de 16.000 millones de euros, 6.000 en ayudas directas y 10.000 en avales a través del ICO.

La cuantía servirá para cubrir ocho pilares: bajar el precio del gas, la electricidad y el carburante, apoyar a los sectores y empresas más afectados, garantizar los suministros, proteger la estabilidad financiera, agenda de transición energética, impulsar la eficiencia energética y reforzar la ciberseguridad.