El acuerdo de salida de Reino Unido de la Unión Europea tendrá importantes implicaciones para la flota irlandesa, que verá reducida su cuota de capturas en un 15% hasta 2026. Así es que el eurodiputado irlandés, Chris Macmanus ha referido una pregunta a la Comisión Europea en la que le plantea si tiene previsto algún plan para el desmantelamiento voluntario de los buques pesqueros que, ante decisión de sus propietarios, opten por abandonar el sector pesquero por propia voluntad. La respuesta de Bruselas ha sido clara: concederá apoyo para contrarrestar los efectos negativos del Brexit siempre y cuando estas ayudas estén vinculadas a una reducción de cuotas.
Aunque la respuesta se dirige al eurodiputado irlandés, sería de aplicación para cualquier armador comunitario. “El apoyo para el cese permanente debe estar vinculado al Acuerdo de Comercio y Cooperación e implicar una reducción de la cuota de pesca tanto para aguas británicas como para aguas de terceros países en los que el Brexit tiene un impacto en la distribución de cuotas”, reza la respuesta de la Comisión Europea. De esta manera, las ayudas impedirán que se cedan cuotas de pesca de unos armadores a otros.
El Brexit ha impactado a Irlanda con la mayor reducción de cuota de pesca de entre todos los países de la Unión Europea. Según Bruselas, los beneficiarios de estas ayudas “deben adaptarse a la nueva situación, mediante la diversificación en nuevas actividades económicas o contribuir a preservar el sector en general”.
