Los 25 supervivientes del Dorneda, el buque vigués de Freiremar que naufragó en la madrugada del miércoles a 308 millas de Comodoro Rivadavia (Argentina), llegaron ayer a tierra. Lo hicieron a bordo de los buques Farruco y Beagle 1 a los puertos de Montevideo y Mar del Plata, respectivamente. El primero, de la misma casa armadora que el pesquero siniestrado, llevaba a bordo al marinero fallecido, de nacionalidad peruana. Las tareas para la localización del desaparecido, también de Perú, continuaban ayer a cargo de medios de la Armada Argentina. Uno de los supervivientes, Santo, ha constatado que fue una brusca maniobra la que provocó que el barco escorase y precipitase una entrada masiva de agua. "El barco iba derecho pero, de pronto, escora. Rápidamente avisé que estaba entrando mucha agua por el trancanil". En ese momento, de acuerdo a su relato, trataron de enderezar el buque con trasvase de gasolina y bombas de achique. "Los marineros no fueron capaces de poner la tapa de emergencia por la presión del agua. Al principio pensaban que era una broma, pero no fue una broma".

Así se rescató a los supervivientes del "Dorneda"

Así se rescató a los supervivientes del "Dorneda"

El desenlace final se precipitó rápidamente, con olas de seis metros y fuertes vientos en la zona. El oficial de máquinas -no estaba de guardia- ordenó a la tripulación que picaran los cabos del aparejo para liberar presión. "Pero era en vano, ya teníamos el barco escorado". El naufragio se desató tan rápido que la tripulación no tuvo tiempo de ir a los camarotes por los chalecos salvavidas, y utilizaron los que estaban dispuestos en el puente, insuficientes para los 27 marineros. "Después, a las balsas", continúa el relato de Santo, también peruano. Fue el oficial de cubierta, siempre según este testimonio, el que lanzó un mayday y activó la radiobaliza, que emitió la señal a las 22:00 horas. Ésta fue recepcionada por el Centro Coordinador de Rescate Marítimo (MRCC) de Madrid, que comunicó la alerta a la Armada Argentina. Se ordenó entonces a los pesqueros Farruco y Beagle 1 que acudieran a la zona, aunque tardaron casi cinco horas en llegar (02:42 am).

"El marinero desaparecido estaba en babor. No apuntó tan cerca de la balsa y se nos perdió, no pudimos hacer nada. Por más que nos pidió auxilio no fuimos capaces, porque además estábamos levantando a otro marinero", relata el superviviente, en un vídeo difundido ayer por la Agrupación Marítima 25 de Mayo y facilitado a FARO. "Él le gritaba al pariente que no lo dejara, pero nada. Se fue. Es jodido". No ha trascendido información de las causas de la muerte de la otra víctima, si recibió un golpe o falleció ahogado. El siniestro deberá ser ahora objeto de investigación por parte de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (CIAIM), dependiente del Ministerio de Fomento, por cuanto el buque tenía bandera española. El Dorneda estaba fuera de las 200 millas de jurisdicción argentina, aunque la Armada asumió las tareas de rescate y búsqueda "según la ley 22.445 y actúa en cumplimiento de las obligaciones internacionales del Estado argentino". A cierre de esta edición los familiares de los tripulantes gallegos esperaban todavía para comunicarse con ellos, y confiaban en que fueran repatriados a la mayor celeridad.