Estas son las zonas de Vigo con más casos de okupación

Una comunidad de vecinos de Vigo se ha convertido en la primera en toda Galicia en acudir a una empresa de desokupación para echar de una vivienda -propiedad de un banco- a sus tres moradores. Los residentes en este inmueble situado en la Avenida de las Camelias aprobaron en junta la contratación de una firma dedicada a los desalojos inmobiliarios y recibieron el visto bueno de la entidad titular del piso. El vecindario recuperó la normalidad en unos días, dejando atrás los problemas de convivencia derivados del elevado volumen de la música, las discusiones a voces, los gritos...

Estas empresas de desokupación tienen en Vigo uno de sus puntos calientes en Galicia. La Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) apuntaba a finales del pasado año que si en la comunidad había un total de 1.000 viviendas con inquilinos irregulares, un 20% se circunscriben a la ciudad de Vigo. Por su parte, la empresa Desokupa 24 horas cifró en 47 los expedientes que tenía abiertos en la urbe a comienzos de año.  

Las zonas más expuestas

La patronal inmobiliaria destacada entre las zonas más afectadas Teis, Navia, O Calvario, Cabral, Travesía de Vigo, Areal, Cervantes, Esperanto, Progreso, Gran Vía, Alfonso XII y varias calles del Casco Vello.

Sobre el tipo de inmueble okupado, Fegein señala que la mayoría son propiedad de entidades bancarias, fondos de inversión y la Sareb (Sociedad de gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria, también conocida como banco malo). El resto son de particulares o de administraciones públicas.

¿Existe un perfil?

Es difícil obtener un denominador común en cuanto a las características de los inquilinos irregulares cuyos desalojos ha recogido FARO. En algunos casos se trata de personas que accedieron a la vivienda mediante un arrendamiento que no llegaron -o dejaron de pagar- y en otros, de simples irrupciones en pisos vacíos.

Entre los primeros descató el caso de una pareja que residía en la calle México que llevaba sin pagar los 875 euros mensuales que costaba el alquiler desde el año 2020. Pese a sumar sueldos que entre los dos superaban los 3.000 euros mensuales, acumularon una deuda de más de 20.000 euros. También el de un matrimonio en Navia, ambos con empleo y sueldo, que encadenó diez meses sin pagar el alquiler, sumando una deuda de 9.200 euros. Además, según informó este periódico, incluso intentó vender la llave del piso a una familia por 1.500 euros para que entrasen a vivir en ella como okupas. O el más reciente, el de un hombre que tan solo abonó el primer mes de una vivienda en Coruxo y que se negó a seguir pagando. No solo debía más de 10.000 euros a los propietarios, sino que además se fue de la casa pero dejándola en manos de su cuñado, que se atrincheró en ella.

En el otro extremo están las irrupciones de viviendas desokupadas y en situación de abandono o ruina. Así ocurre en el Camiño Redomeira, una paralela a la calle Aragón en la zona de O Calvario. La calle está asolada por inmuebles abandonados, donde alternan okupas que llevan años vivienda allí con otros recién llegados o que están de paso. La zona es víctima de la marginalidad, al tratarse de un punto de venta y consumo de drogas donde son frecuentes las peleas.

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