MIGUEL LAGO | Humorista

“Quería volver a sentirme con el hambre de cuando empezaba”

El “showman” vigués presenta su nuevo espectáculo hoy en el Teatro Afundación: “Nunca hay dos funciones iguales”

El humorista Miguel Lago.

El humorista Miguel Lago. / VÍCTOR P. CURRÁS

Víctor P. Currás

Víctor P. Currás

Con un ojo en el futuro de la comedia y otro en el resultado del Celta el domingo en Balaídos, Miguel Lago (Vigo, 1981) vuelve a casa. El humorista y showman presenta su nuevo espectáculo de stand-up en el Teatro Afundación hoy a las 18:30 y 21 horas.

–Hace un año recalaba en Vigo para cerrar la primera gira tras la pandemia. Ahora vuelves pero con un formato más tradicional, de vuelta a los orígenes y de humor de stand-up. Imagino que es lo que le pedía el cuerpo.

–Es lo que me pedía el cuerpo al hacer tantas funciones y residencia en Madrid. Con la gira estoy volviendo ya a números de pandemia y a superar el centenar de pases al año. No quería hacer lo mismo todas las semanas. El Todo Al Negro, Miguel Lago pone orden, es un guión cerrado, lo estás haciendo durante dos años. Yo quería volver a contar las bromas y cosas que estoy haciendo cada semana. Quería volver a sentirme con ese hambre de cuando empezaba, donde no paraba de sacar material. Y eso es lo que hago. Por eso nunca hay dos funciones iguales. Ahora el espectáculo es ir a verme a mí y ver qué tengo que contar esa noche. Esta temporada he sacado más de siete horas de material de stand-up entonces nunca hay dos funciones iguales.

–¿La gente repite?

–Muchísima, se puede ver o comprobar en Atrápalo. Me escriben de he visto a Miguel esta temporada tres veces, cuatro veces, cinco veces. Y es porque cada semana estoy con la cantidad de cosas que me pasan como para no cambiar la función cada semana. Solo con mis movidas ya tengo material nuevo.

–¿Ya no estaba cómodo con el monólogo cerrado que en cinco meses puede estar obsoleto y prefiere algo más personal?

–Totalmente. Lo que realmente me va a hacer diferente al resto de compañeros soy yo mismo. Contar las cosas desde que a mí me pasan y desde mi punto de vista. Eso es lo que te hace único. Entonces yo aprieto eso hasta las últimas consecuencias.

–Aseguraba hace unos meses que está en declive este tipo de formato por la falta de espacios. ¿En qué lo nota?

–Estoy haciendo promoción de cómicos amateurs porque después de más de 20 años considero que tengo que devolverle a la comedia mucho de lo que me ha dado a mí. Tengo un apadrinado, Fer Bleda, que va a estar en Vigo y es el presentador en Madrid. Porque no hay salas como había hace 20 años donde subirse cada semana. Cuando empecé hacía cuatro actuaciones a la semana y los que empiezan hoy no tienen esos espacios, entonces se los quiero dar. A partir de septiembre voy a producir en Madrid un espectáculo de cómicos amateurs en teatro para que puedan subirse cada semana varios. Lo digo porque la falta de escenario lo que provoca es que haya que buscarse la vida.

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FDV

–Algunos de ellos optan por las redes sociales con reels y TikTok pero con fragmentos para darse a conocer.

–En las redes sociales tú puedes hacer humor, pero no vas a hacer stand-up. Stand-up es un género que necesita una tabla, un escenario y un micrófono público. No se hace ni desde el salón de casa ni en un podcast, eso es otro género. Yo defiendo el género que yo llevo 25 años haciendo y peleo para que perdure en el tiempo.

–¿No lo ve como una vía para el futuro?

–No. La stand-up es la stand-up. Es un monólogo cómico donde toda la acción de la historia recae sobre la espalda del cómico. Lo puedes ver en casa, pero sobre todo se disfruta en directo. Yo hablo de mi género y soy un rockero. Me puedes decir que ahora mismo el reggaetón lo peta y digo estupendo. Yo no hago reggaetón, hago rock and roll. Con todo el respeto al reggaetón. Pues yo no hago ópera, no hago zarzuela, yo hago rock y el rock desaparece.

–Hace un año también me decía que uno de sus objetivos profesionales era montar un show en Castrelos, en el Auditorio del Parque. ¿Ha habido avances al respecto?

Sí. Lo que pasa es que este verano todavía no podía ser. Faltaba recuperarnos del todo y todavía estamos en la transición, quizá para el verano que viene. Aún nos quitamos la mascarilla en transporte en febrero y siguen viniendo espectadores a los que respeto con mascarilla a los teatros. Yo creo que la temporada que viene ya será por fin la del olvido.

–Hablando de temporadas y planes para el año que viene. El Celta se juega la vida el domingo en el año del Centenario. ¿Cómo lo está viviendo?

–Mal. Profundamente mal. Porque además no es solo eso: el domingo es mi cumpleaños. Peor no me lo puede poner. Yo tengo confianza que no se dé el caso. Porque, joder, es que un centenario en Segunda División puede ser letal para el club. Tengo mucha fe. De hecho, hago un llamamiento a la afición a no enredar. El lunes hablaremos de lo que se ha hecho mal. Ahora mismo apoyar a muerte todos los días hasta que quite el árbitro.

–Quizás dentro de diez o quince años pueda hacer bromas sobre este hecho, pero ahora….

–A corto plazo no me hace gracia alguna. No, es que de verdad, no estoy ahí. No lo quiero ni pensar. No lo quiero ni pensar. Confío en que no se va a dar el caso.

–¿Se ha acostumbrado a ser una cara conocida de la televisión o todavía sigue llegando gente nueva?

–Muchísima gente nueva porque ahora ya soy un rostro fijo de Antena 3. Me ha abierto las puertas de un público más familiar y también de más edad. Y estoy encantado de responder. Fíjate que el año pasado hicimos una función y esta dos. Porque el pase de las 9 estaba totalmente vendido en enero, seis meses antes. Y me da la sensación de que si hubiera hecho cinco, cinco hubiésemos llenado.

–Es un reto de cara al futuro también.

–No, es que haremos Castrelos. Hemos pasado de vender todo, pero que podías comprar entradas para verme en los últimos días, a que no haya, a que se haya llenado el teatro García Barbón con cinco meses de antelación. Creo que la próxima temporada puede darse ya el caso de hacer algo en Castrelos directamente para 20.00 vigueses. ¿Por qué no?

–Precisamente en la televisión hubo un comentario suyo en El Hormiguero que fue bastante comentado en redes sobre la candidata de Podemos en Valencia a las elecciones municipales. ¿Cómo vivió ese revuelo a nivel personal?

–En Barcelona viendo a Elton John, así es como lo viví. Con mi familia en Barcelona viendo al dios al que le rezo. En ningún caso el ruido ni la mentira me afectan. Lo hemos vivido de una manera muy tranquila.

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