Las averías del material dejan retrasos de más de 40 minutos en los trenes entre Vigo y A Coruña

Nuevo lunes negro para los viajeros del tren de Media Distancia en Galicia. A las habituales limitaciones de velocidad en el Eje Atlántico por falta de mantenimiento o los problemas de personal se sumaron en la jornada de ayer averías en el material rodante que conecta Vigo y A Coruña provocando retrasos de casi una hora en varios servicios a lo largo del día.

Los dos primeros servicios “madrugadores” desde la estación de Urzáiz, con salida a las 6:40 y ocho de la mañana, sufrieron una demora de 79 y 35 minutos para desesperación de muchos de sus viajeros que debían llegar a sus puestos de trabajo en otras ciudades gallegas.

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Ante la elevada demanda estaba previsto que ambos circularan en doble composición, pero incompatibilidades de uno de los convoyes con otro obligaron a traer un tercer tren desde los talleres de Redondela. Esta situación se repetiría en la siguiente frecuencia, así como en el regreso desde A Coruña, que llegó 58 minutos tarde.

Fuentes sindicales apuntan a que el aumento de los pasajeros gracias a la gratuidad de los bonos de Media Distancia –que se han multiplicado por dos– ha obligado a exprimir el uso de los trece trenes de la serie 121 que conectan el Eje Atlántico y la línea a Ourense, por lo que es “imposible realizar las programaciones de mantenimiento establecidas en su totalidad” al estar todo el material en circulación.

Solamente la incorporación de al menos dos vehículos más evitaría estos problemas que ya suponen el enésimo quebradero de cabeza para sus maltratados usuarios.

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Ya por la tarde, la avería del Regional 12528 a su paso por Santiago de Compostela provocó la salida con 20 minutos de retraso del siguiente servicio (12431), con salida desde A Coruña a las 15.50; además de retrasos de un cuarto de hora en otros trenes programados en esa misma franja.

En las últimas semanas la nueva distribución de los cuadros de trabajo de los maquinistas y la instalación de nuevos escáneres de seguridad había mitigado los retrasos crónicos que sufre esta línea, la segunda más utilizada en toda España.