Casi una decena de intervenciones por botellón en la vía pública y viviendas así como el traslado al Hospital de dos varones por intoxicación etílica, uno de ellos menor de edad, es parte del balance que dejó esta pasada noche el ocio en la ciudad, llegando a actuar los agentes de la Policía Local hasta en un total de 137 ocasiones. Los desalojos se produjeron en las calles Hernán Cortés, Plaza de Portugal, Teixugueiras (Navia), Panamá, Salceda y Mestre Chané.

Tocamientos

A estos partes hay que sumarle también la detención de un varón de nacionalidad portuguesa por la presunta comisión de un delito de abusos sexual. El hombre, según explicó la víctima, le habría realizado varios tocamientos en el culo en una discoteca, poco después de las 05.00 horas de la madrugada.

Los agentes también actuaron hasta en cuatro incendios, previsiblemente provocados, en las calles Toledo, Silgar y Ramón Nieto, en Lavadores.

Episodios con retranca

A mayores de estas intervenciones de calado, los agentes se encontraron con otras situaciones más surrealistas que delictivas. Por un lado, recibieron la alerta de un vecino quien a medianoche avisó que en una entidad bancaria había movimiento e incluso estaban las llaves del local en la puerta. A su llegada, la patrulla se encontró con un trabajador del banco durmiendo en su interior porque no quería ir a su casa.

Circulando por la vía pública, los agentes se cruzaron con un ciclomotor con una luz extraña. Al acercarse al mismo comprobaron que se trataba de una linterna cuyo conductor tenía atada con cinta o celo al manillar del vehículo.

Disparos

En Travesía de Vigo, un varón amenazó al dueño de un bar con un arma de fuego que, finalmente y tras ser localizado, resultó ser de juguete. Real fue el disparo que recibió un varón cuando discurrían a primera hora de esta mañana por la senda verde. La pareja realizaba un paseo cuando, a la altura del Colegio Monterrey, el hombre recibió un disparo de una escopeta de balines. Los agentes trataban esta mañana de localizar al responsable.