La alegría por el cercano estreno del primer carril bici municipal, entre Teis y Samil, y la demanda de más infraestructuras y medidas que fomenten el uso seguro de este medio de transporte sostenible por la urbe, centraron la última edición de A Pedaliña. Ante los más de medio millar de participantes en la gran marcha ciclista popular viguesa, el alcalde, Abel Caballero. Se reafirmó en su compromiso de crear otras tres sendas más. A Golpe de Pedal, organizadora de la cita, animó a conseguir "una ciudad amiga de la bici de verdad".

José Manuel Suárez, presidente del colectivo, destacó la importancia de la disponibilidad de infraestructuras destinadas al ciclista para poder garantizar su seguridad. Calificó de "emocionante" el carril bici entre Teis y Samil por su amplio recorrido con el que "vertebrará la ciudad". "Habrá que cambiar cosas, seguro, pero es un proyecto valiente", defendió. Suárez pidió "cambiar el chip de la movilidad" en la ciudad, dejando los coches "un poco fuera" y reservando más espacios para peatones y bicicletas. Demandó medidas para fomentar el uso de estas últimas y lograr que no sean vistas como un peligro, sino como "un transporte sano, eficaz y sostenibles".

Caballero coincide en que "tiene que ser una forma de movilidad óptima". "Mi sueño es que Vigo sea como una de esas ciudades de Holanda, con miles de bici. El tiempo no es disculpa, los carriles bici sí y los estamos haciendo", sostuvo. Tanto en el que está en construcción como en los otros tres que prevé, asegura que "la principal preocupación" es la seguridad.

El delegado de Zona Franca y el que inició el proyecto de este primer carril bici cuando era edil, David Regades, partió ayer en la marcha con el dorsal 1. Destacó que en las obra que ejecuta el Consorcio también se prevén estas sendas porque "tiene que ser un medio de transporte también para los trabajadores".

En remolques, en sillas portabebés, en sillines extra entre el de un adulto, en bicicletas enganchadas mediante una barra a las de sus mayores o pedaleando de forma autónoma. La marcha de ayer contó con una gran presencia de niños de todas las edades, fomentando la afición desde enanos. Uno de los más pequeños, con 15 meses, era el segundo hijo de Ana Rial y Eduardo Fernández. Les gusta mucho la bici pero van al monte porque, por ahora, "sin carril y con niños" no ven viable circular por la ciudad. Aunque "mejor que nada", no les convence el que la Xunta ejecutó en Ricardo Mella: "No lo vemos seguro. Debería ir independiente, para que un coche no pueda pasar".

Natalia Pajón se estrenaba ayer con su pareja y su hermano en A Pedaliña. Estaban allí porque a su hijo, Leo Lago, de 9 años, "le encanta la bici" y en la ciudad no hay ocasiones tan buenas como esta. En verdad, reconoce que no pedalean por las calles de Vigo porque no lo ve "seguro". "El carril bici me parece genial. Salgo todo los días por la ventana para ver si está terminado", cuenta.

Los más experimentados de la marcha popular eran los integrantes del Club Ciclista Vigués. Nacho y Ramón Rodríguez, de 17 y 15 años, llevan unos seis años "enganchados" a la bicicleta. Estaban contentos con la respuesta de los vigueses ayer por el apoyo que demuestra a este deporte.

La cita reconoció la "defensa del deporte sin límites" de Discamino y recogió fondos a favor de Afaga.