Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Regades retoma la ampliación de Balaídos para que PSA "pueda crecer"

Zona Franca abordará con el nuevo director las necesidades de espacio de la empresa

Vista parcial de la planta del Grupo PSA y del estadio municipal de Balaídos. // Marta G. Brea

La ampliación en unos 200.000 metros cuadrados del polígono de Balaídos vuelve a estar sobre la mesa de la Zona Franca. Una vez finalizada la transformación del parque, crucial para que PSA-Vigo pudiese adjudicarse los últimos dos lanzamientos (K9 y V20), el consorcio que pilota David Regades recuperará el proyecto frustrado de ampliación del polígono más veterano de Galicia para que su principal inquilino "pueda crecer". "Lo dije tras mi nombramiento, ninguna empresa volverá a irse de Vigo por falta de suelo", aseguró. Zona Franca abordará en los próximos días las necesidades de espacio del centro en una reunión con el nuevo director de PSA-Vigo, Ignacio Bueno, que en su primer discurso público, el pasado viernes, hizo hincapié en la necesidad de seguir trabajando en cuestiones como las infraestructuras de transporte y la logística.

Dentro de ese capítulo, PSA necesitaría generar espacio cerca de la factoría para acercar a sus proveedores, como fórmula para ahorrar en costes logísticos y competir con las fábricas de países low-cost, que tienen un coste de producción mucho menor. Esta necesidad ya fue planteada por los anteriores directores de PSA-Vigo, lo que llevó a Zona Franca a programar una ampliación de 200.000 m2 que quedó paralizada por falta de encaje urbanístico tras caerse el PXOM de 2008, como avanzó este periódico. Pero Regades considera que hay "fórmulas" para retomar el proyecto -bien a través de un plan sectorial, la Lei Vigo, etc.-, recogiendo así el guante lanzado el pasado viernes por Ignacio Bueno durante su discurso en la entrega del Premio Economía del Consello Galego de Economistas al centro vigués.

Los técnicos de Zona Franca y el Concello ya han mantenido varias reuniones al respecto y en los próximos días el propio Regades se sentará con Bueno para conocer de primera mano las necesidades de espacio actuales y futuras de la factoría, que emplea a más de 5.000 trabajadores y tira de un sector con una facturación superior a los 8.000 millones de euros. La contribución del consorcio a la transformación del polígono, con la construcción de nuevas naves en alquiler para PSA -como las naves H y G, entre otras-, la reordenación de los accesos y otras mejoras, resultó clave para que PSA-Vigo se adjudicase el calendario de lanzamientos de vehículos más ambicioso de toda la historia del centro, con los proyectos K9, ahora reforzado con una cuarta furgoneta para Toyota, y V20, que acarrearon una inversión millonaria y la reactivación de las contrataciones en Balaídos.

La falta de terreno industrial -y la carestía del poco que sale al mercado- ha sido un problema para el sector desde hace décadas, presionado además por las ofertas low-cost del norte de Portugal. Esta carencia ha condicionado en cierto modo el crecimiento de la propia PSA-Vigo, que es la fábrica más urbana del grupo francés y la más pequeña en superficie (algo más de 600.000 m2), y de multinacionales de componentes asentadas en la comarca. La última, la alemana Benteler, que al no poder crecer en el Parque Tecnológico y Logístico de Vigo (PTL) ha extendido su actividad a Mos con una nueva fábrica -en construcción-.

De hecho, los polígonos de Zona Franca están prácticamente llenos (Balaídos, Bouzas, Porto do Molle, A Granxa), pendiente de la ampliación del PTL -pero que tendrá un uso comercial- y los desarrollos de A Pasaxe y más alejada, la Plisan, entre Salvaterra-As Neves. Otra demanda sobre la mesa de PSA y del conjunto de la industria es una central de estacionamiento y servicio para los miles de camiones que entran y salen a diario de Balaídos, los principales polígonos del área y los recintos portuarios.

Compartir el artículo

stats