"Uniformados para un día de luto". Con camiseta negra y silueteado el Xeral, el equipo de Urgencias apagó las luces esta mañana. A las 8 cerraba las puertas y se quedaba vacío.

Apenas tres horas después, a las 11.08 horas, el retén sanitario que se mantuvo en las instalaciones para resolver las emergencias pendientes, terminó de atender al que pasará a la historia como su último paciente, aquejado de un dolor en el pecho. Romántico epílogo para echar el cierre al corazón sanitario de la ciudad que ya late en Beade, donde la pequeña Lía ha sido la primera en cruzar la puerta

Con los traslados de Urgencias, UCI, Reanimación y del Área Materno-Infantil, el Hospital Xeral cesa su actividad de hospitalización y atención sanitarias tras 60 años de actividad. La torre de la calle Pizarro mantendrá los laboratorios de Microbiología y análisis clínicos, que en breve pasarán al Meixoeiro, y un servicio de TAC, que se emplazará en el Anexo II.