Todos los pronósticos lo avanzaban aunque los más entusiastas del chapuzón temían que ocurriese como en días pasados, cuando el viento de componente norte refrescó demasiado el ambiente. Torallamar, el observatorio meteorológico y oceanográfico de la Universidad ubicado en esa isla de Canido, dio en el clavo al lanzar sobre las diez de la mañana de ayer el siguiente tuit: "Hoy tendremos un día de playa, con menos viento que ayer y máximas de 27º! Aún falta un poco para el verano, pero esto ya se le parece mucho!".

Este mensaje resumió tal cual el escenario que disfrutaron ayer cientos de vigueses. Acudieron en masa a playas como las de O Vao o Samil como si fuera la última oportunidad de bañarse o de tomar el sol antes llegar otra borrasca. Y es lo que ocurrirá dentro de unos días, ante la previsión de un empeoramiento del tiempo.