El aparcamiento de Industriales se convirtió ayer en rampa de lanzamiento para un globo estratosférico, el primero de los cinco dirigibles que los investigadores del grupo Cima de la Universidad enviarán a 30.000 metros de altura, el triple de distancia a la que vuelan los aviones comerciales, para poner a prueba los componentes del futuro satélite FemtoXat.

El equipo trabaja en el experimento desde julio y, aunque ya había contactado con Aena hace meses, el lanzamiento se retrasó dos horas debido a la demora en recibir la autorización de los controladores militares. De esta forma, el globo de hielo partió a las 11.15 horas del campus e inició un vuelo que terminaría tres horas después, a unos 150 kilómetros de Vigo, en una zona boscosa de la localidad lucense de Escairón. Allí los investigadores recuperaron la carga útil del dirigible gracias al GPS instalado a bordo.

Un globo similar, aunque de tamaño mucho mayor, permitió el pasado octubre la gesta de Felix Baumgartner, sin embargo, este tipo de dirigibles, aunque sí se utilizan en estudios meteorológicos o solares, no son habituales en la industria aeroespacial.

La universidad viguesa pretende aprovechar las ventajas de estos artefactos para ensayar "en condiciones de vacío y con una oscilación de bajas y altas temperaturas los componentes de los satélites comerciales", tal y como explicó ayer el responsable del grupo Cima y vicerrector de Transferencia, José Antonio Vilán.

En este primer vuelo, el equipo responsable del globo -integrado por Gabriel García, Miguel López, Pablo Yáñez y Jacob López- embarcó una batería de ion-litio que podría ser utilizada en el FemtoXat, no obstante, la complejidad de los próximos lanzamientos irá en aumento y se pondrán a prueba sistemas para el despliegue de antenas y paneles solares, así como de electrónica.

La carga útil del globo, con un diámetro de 1,5 metros, era una caja hermética de 800 gramos que incluía, además de la batería, diversa instrumentación para medir el campo magnético de la Tierra, la temperatura o la aceleración de la gravedad. En el exterior de esta "caja negra" también se instaló una cámara de vídeo para recoger imágenes del vuelo hasta los 30.000 kilómetros de altitud y de su posterior descenso y aterrizaje en Escairón tras estallar la cámara de látex y abrirse el paracaídas.

Las simulaciones previas situaban el aterrizaje en la localidad de Sober, pero la demora en el lanzamiento y las variaciones en el régimen de vientos acabaron por alterar el punto de regreso en varios kilómetros hacia el norte dentro de la provincia lucense.

El equipo de investigadores partió en un vehículo desde el campus en cuanto el dirigible comenzó su ascenso pero, en previsión de que no llegasen a tiempo, la carga útil portaba una pegatina advirtiendo de la naturaleza experimental del artefacto y facilitaba un teléfono de contacto para poder devolverlo a sus propietarios.

Al lanzamiento del globo estratosférico también asistió el profesor Fernando Aguado, responsable del proyecto del XaTcobeo y del HumsatD, el primer satélite de la red mundial Humsat auspiciada por la ONU que ya tiene "prácticamente confirmada" la fecha de salida el próximo mayo desde la estación rusa de Baikonur.

El FemtoXat, de apenas 250 gramos de peso, podría ser lanzado "a principios de 2014", aseguró ayer Vilán, y servirá como repetidor de la señal de los sensores de la red Humsat.

Un año después de que el XaTcobeo convirtiese a Vigo en la primera universidad española en poner en órbita un satélite con los estándares cubesat, Vilán destacó que el lanzamiento del globo estratosférico supone "un hito muy importante" en el contexto gallego y nacional.