Las 24 horas del día, los 365 días del año. Disponibilidad total y absoluta es lo que ofrecen los cuatro agentes de la Policía Local de Vigo que integran el Equipo de Vigilancia y Apoyo Policial (EVAP) para casos de violencia de género y que se encargan de constatar que se cumplen las órdenes de alejamiento dictadas por el juez. Son tres hombres y una mujer, todos jóvenes, que llegan a convertirse, en muchos casos, en las personas de confianza de las víctimas de la violencia de género, en su mayoría femeninas, aunque también hay hombres e incluso padres que precisan de este tipo de protección contra sus hijos.

Los tres agentes y el cabo que coordina el servicio, que quieren mantener sus nombres en el anonimato, gestionan en estos momentos un total de 108 órdenes de alejamiento. "Cada uno se hace cargo de unos casos determinados. En cuanto llega la orden, lo primero es localizar a la víctima, algo que a veces resulta un poco complicado porque suele cambiar de residencia, de número de teléfono...", explican. El siguiente paso es concertar una entrevista personal. "Allí nos presentamos, le damos el número de teléfono directo al que nos pueden llamar cuando quieran", apuntan. Y como cada uno lleva sus casos, "conocemos exactamente los riesgos potenciales, los antecedentes del agresor, si hay hijos o no, dónde viven...".

Entrega

Reconocen que "cuando nos ponemos en contacto con las víctimas, se sorprenden y también se quedan más tranquilas sabiendo que tienen a alguien disponible las 24 horas", aunque señalan que "nos gustaría hacer todavía más". En el caso de recibir una llamada, valoran el peligro "y en función de lo que pase actuamos avisando a nuestros compañeros para que intervengan y procedan a la detención o para levantar un atestado". Sin embargo, señalan que "muchas veces llaman por hablar, porque se sienten mal y necesitan desahogarse. En estos casos, haces más de psicólogo que de policía porque simplemente escuchas".

Insisten en que "nosotros sólo somos la cara visible pero detrás tenemos un equipo no sólo de más agentes, sino de otros servicios como el Centro de Información á Muller (CIM)". De ahí que parte de sus funciones sean también las de informar sobre las ayudas sociales, legales o psicológicas a las que pueden acudir, además de explicarles pautas de comportamiento para evitar las agresiones. "Se les recomienda que cambien de horarios, que eviten las rutinas o que lleven los números de emergencia prefijados en el teléfono móvil".

"Sólo queremos que la víctima sepa que aquí se hace algo, que no está sola porque es muy duro denunciar", subrayan. Y reconocen que es un trabajo "muy difícil en el que a veces resulta satisfactorio darse cuenta de que lo que hacemos vale para algo, pero en otras ocasiones estás en demasiada tensión, conoces en primera persona verdaderos dramas y es inevitable involucrarse un poco con los casos que llevamos".

Pese a ello, estos policías que se integraban en una Unidad de Investigación, apostaron por un servicio que "puede que haga que la gente denuncie y pierda el miedo al ver que sí se trabaja y sí se hacen cosas contra la violencia de género". La EVAP está en las dependencias de la Jefatura de la Policía Local y su número de teléfono es el 986-442942.