Médicos, abogados y dentistas, a la espera de homologar sus estudios para poder ejercer

El atasco burocrático para convalidar las titulaciones universitarias extranjeras alcanza los 100.000 expedientes sin resolver en España | En Galicia ya hay unos 300 afectados reunidos en una plataforma

Manifestantes durante una protesta por la demora de las homologaciones el año pasado, en Valencia.

Manifestantes durante una protesta por la demora de las homologaciones el año pasado, en Valencia. / D.C.

Carlos Gayoso

Omar Montilla es natural de Venezuela. Se graduó en Medicina hace 30 años por la Universidad de los Andes y, desde hace unos meses, reside en Sada. Actualmente ejerce como ayudante de cocina en un restaurante de la localidad coruñesa. Lleva tres años esperando a que el Ministerio de Universidades homologue su título para que pueda ejercer su profesión.

El caso de Omar es el caso de cientos de profesionales titulados en el extranjero que, a día de hoy, no pueden ejercer su oficio en el país porque no cuentan con la homologación pertinente de su titulación universitaria debido al atasco burocrático que existe en la Administración.

Según datos del Ministerio de Universidades a fecha de septiembre de 2023, a nivel estatal todavía había 50.000 expedientes de extranjeros sin revisar y 30.000 incompletos. Además, el propio Ministerio reconoce que entran 5.000 casos nuevos al mes, lo que sitúa el total en unos 100.000 aproximadamente en toda España.

La cifra exacta de residentes en Galicia que se encuentran en este estatus no ha trascendido. No obstante, colectivos de afectados ya se han movilizado en la comunidad. Tal es el caso de Homologación Justa Ya, una plataforma formada por más de 80.000 afectados por el atasco burocrático de las homologaciones en España. En Galicia, los afiliados rondan las 300 personas. La organización ha convocado para el próximo 26 de enero una concentración frente a la Delegación del Gobierno, en A Coruña.

“Ya he trabajado de todo”

La tesitura de no poder ejercer su especialidad a la hora de emigrar a otro país supone una auténtica odisea para aquellos que llegan por primera vez a España y que se tienen que buscar la vida de algún modo. “Ya trabajé de todo. Cuando llegué, empecé haciendo de jardinero y ahora trabajo de ayudante de cocina a la vez que asistente de transporte escolar”, indica Omar, que lamenta que “ni siquiera he logrado encontrar un empleo a jornada completa”.

Omar llegó a Galicia hace tres años huyendo de la dura realidad que atravesaba Venezuela en aquel entonces. “Ejercía de obstetricista y ginecólogo, pero nos tuvimos que marchar porque aquello era insostenible”, dice el médico. Una vez aquí, pidió la homologación de sus títulos que, además de la carrera de Medicina, incluyen varios másteres. “No entiendo estas demoras de años cuando vemos todos los días que hay un déficit en el sector médico”, apostilla el facultativo venezolano.

Un caso similar al de Omar es el de la colombiana Jessica Gaitán, graduada como odontóloga en su país en el 2019. Después de trabajar en la plantilla médica de las Fuerzas Aéreas Colombianas, se trasladó a Galicia. “Mi pareja es de aquí y, además, quise cursar un máster”, dice. “Llevo dos años pendiente de la homologación y no puedo ejercer”, lamenta la colombiana, que actualmente se encuentra realizando cursos para desempleados del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

A pesar de que el gremio de la Medicina es el que más está sufriendo las consecuencias del atasco, ninguna profesión se libra del retraso de las homologaciones. Javier Larrea tiene 26 años y viene de Cuba. Se licenció en Derecho en su país y hace unos meses se trasladó a Santiago de Compostela. Efectuó los trámites hace tres años y todavía permanece a la espera. “Inicié el papeleo antes de venirme a Galicia, pero no sirvió de nada”, dice el jurista, que se gana la vida a través de las ofertas que le llegan desde las Empresas de Trabajo Temporal. “Ejercí en diversos sectores, como la hostelería, pero ahora estoy como discontinuo en una empresa de limpieza”, indica.

Javier también lamenta que esta larga demora repercuta en su objetivo final, que es el de realizar el máster de abogacía. “Es algo que necesito para ejercer de abogado, pero no lo puedo hacer hasta que me homologuen el título”, indica. Además, el cubano asegura que también existen españoles en la misma situación que él: “Hay gente de aquí que se fue a estudiar fuera y, cuando volvió, se encontró con que no le aceptaban la titulación”.

Aunque el número de solicitudes esté batiendo récords, esta situación se remonta la mitad de la década pasada, cuando el Gobierno de Mariano Rajoy promulgó el Real Decreto 967/2014, que establecía los requisitos para realizar las homologaciones de titulaciones extranjeras en España. Esta disposición contemplaba un máximo de seis meses para tramitar las peticiones pero, en la práctica, no fue lo que sucedió.

Desde aquel momento, las solicitudes para homologar titulaciones extranjeras se fueron multiplicando exponencialmente año tras año, acumulando investigaciones en tramitación que no se cerraban e incumplían los plazos estipulados. “Se llegaron a detectar expedientes de homologación de más de cinco años de duración que aún se encontraban pendientes de resolución”, sostenía un informe realizado por el Defensor del Pueblo en 2021 donde se denunciaba la “inacción” del Ministerio de Universidades.

Situación agravada

Un año más tarde de este escrito y con una situación todavía más agravada, el Gobierno de Pedro Sánchez promulgó, al igual que su predecesor, otro real decreto para agilizar los trámites de las homologaciones y, a su vez, efectuó un plan de choque ante la severidad del panorama. Se reclutó a un equipo de 68 funcionarios con una clara misión: tramitar más de 30.000 expedientes pendientes en un plazo máximo de seis meses, que fue lo que contempló el decreto.

Aunque había muchas expectativas, el atasco no se desbloqueó y las medidas terminaron en saco roto. El plan apenas funcionó durante dos meses. El plantel de administrativos pasó de 68 a 15 miembros y las solicitudes siguieron creciendo drásticamente, llegando hasta la elevada cifra actual.

Ahora, el Gobierno trata de desencallar otra vez la situación. El Ministerio de Universidades ha anunciado un nuevo aumento de plantilla para la comisión encargada de tramitar los expedientes, con 26 nuevos trabajadores, fijando el total en 41, algo que no convence a las organizaciones de afectados. “Si en su día no pudieron con menos solicitudes y 68 funcionarios, ahora no van a lograrlo con 41 y 100.000 homologaciones pendientes”, indican desde Homologaciones Justas Ya.

Tres realidades

Javier Larrea

Javier Larrea / ECG

Javier Larrea, abogado en Cuba y limpiador en Galicia

Este joven de 26 años estudió la carrera de Derecho en Cuba, país en el que nació. Lleva tres años pendiente de la homologación, lo que le impide realizar el máster de acceso a la abogacía. A día de hoy ejerce como discontinuo en una empresa de limpieza.

Jessica Gaitan

Jessica Gaitan / ECG

Jessica Gaitán, odontóloga en Colombia, hace en cursos para parados

Se graduó en el 2019 como odontóloga en Colombia, su país natal, y se vino en 2021 a Santiago. Lleva dos años en espera para homologar su título. Ahora se encuentra realizando cursos para desempleados del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

Omar Mantilla

Omar Mantilla / ECG

Omar Mantilla, médico en Venezuela, cocinero en Galicia

Nacido en Venezuela, este médico lleva más de 30 años licenciado en Medicina y cuenta con varios másteres. A causa del atasco burocrático, no puede ejercer. Trabaja como ayudante de cocina en un restaurante de Sada, en la provincia de A Coruña.