Un total de 78.388 vehículos fueron controlados en la última campaña especial de velocidad en vías convencionales de la comunidad gallega, segundo informó la delegación del Gobierno en Galicia. Unos 4.006 conductores fueron denunciados entre el 12 y el 18 de agosto, fechas en las que se desenvolvió la campaña.
La DGT y la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil coordinan la operación especial de tráfico de verano, con casi 10 millones de desplazamientos por carretera en Galicia. El dispositivo sirvió para mejorar los datos de siniestralidad en las vías gallegas, que llegaron a acumular a principios de año 15 víctimas mortales más que en 2018, una cantidad que se redujo a tres, según la delegación del Gobierno. “El objetivo sigue siendo llegar a cero víctimas”, señala el delgado del gobierno, Javier Losada, en un comunicado.
Victimas mortales
En la actualidad, Galicia acumula 61 victimas mortales en sus carreteras hasta la fecha, tres más que en el mismo período de 2018.
Por provincias, Ourense es la única que desciende en victimas mortales, con seis menos que en 2018. En A Coruña sube cuatro, de 26 a 30; en Lugo aumenta dos, de 8 a 10; y en Pontevedra crece en tres, de 13 a 16.
“Son datos muy preocupantes y seguiremos trabajando para invertirlos”, apunta el delegado del gobierno, que recuerda que además del dispositivo especial de verano, el Ejecutivo rebajó en 10 kilómetros por hora el límite de velocidad de las carreteras convencionales, ahora situado en 90.
Intensificar los controles
Por otro lado, “está previsto intensificar los controles preventivos de alcohol y droga”, avanzan desde el Gobierno.
También se señala que colectivos como peones, ciclistas y motoristas son un porcentaje muy alto de las víctimas registradas, así como la distracción motivadas por le uso de dispositivos electrónicos.
