El sector de los críticos con la dirección de Luís Villares sumó ayer tres apoyos explícitos, dos de los cuales procedieron de los alcaldes de Santiago, Martiño Noriega, y Ferrol, Jorge Suárez, que con el de A Coruña, Xulio Ferreiro, son el símbolo de la irrupción de las mareas y en mayo se juegan la retención del bastón de mando. El herculino también es opositor a Villares.
Noriega compartió un encuentro en Santiago con Bruzos y defendió abrir En Marea frente a una estrategia de la dirección de Villares, al que reprochó prácticas de "vieja política" en relación a la revelación de qué diputados donan dinero al partido. Por su parte, Suárez anunció su voto a la lista de Bruzos e instó a Villares a huir del "y tú más". "Las campañas deben de centrarse en objetivos políticos y no en los ataques personales", dijo.
El tercer apoyo a Bruzos procedió de la diputada Carmen Santos, exlíder de Podemos en Galicia, que justificó su aval por la participación de la nueva dirección morada en la lista "Entre todas".
