La Consellería de Educación e Cultura se reúne hoy con los sindicatos para desvelar sus planes respecto a las oposiciones anunciadas para este año, bloqueadas la semana pasada por el Ministerio de Hacienda hasta que se aprueben los presupuestos generales de 2017, en los que se establece la tasa de reposición, es decir, el porcentaje de vacantes que pueden cubrirse. Su "voluntad" es ofrecer los puestos siempre que esté blindada su "seguridad jurídica".

La incertidumbre marca el futuro de la oferta de empleo público. El viernes pasado, el conselleiro Román Rodríguez aseguró que ultimaban un borrador de orden para lanzar las pruebas siempre que recibiese autorización por parte del Ministerio de Hacienda. Un día antes, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, fijó como fecha límite mediados de abril para poder convocar las oposiciones con el tiempo suficiente para que los profesores se incorporasen a partir de septiembre, mes de inicio del curso lectivo.

Rodríguez, que reconoció que en el terreno educativo "urgen los plazos", insinuó ayer que la convocatoria de empleo se encuentra cerca y explicó que la Xunta busca adelantar trabajo y "todo aquello necesario" para lanzar su oferta pública de empleo (OPE) "en el caso hipotético de que se puedan sacar estas plazas con la seguridad jurídica precisa".

La Xunta anunció la convocatoria de 1.112 plazas en educación sin tener la certeza de la aprobación de las cuentas estatales, pero la semana pasada Hacienda dejó en el aire su oferta al condicionarla a la aprobación de esa planificación económica para 2017. Feijóo abrió la posibilidad de convocarlas aplicando la tasa de reposición del año pasado, que era del 100% en sanidad y educación, pero la Xunta ha eludido confirmar si optará por esa vía. El presidente deslizó, eso sí, que en el primer caso podrían sacar a concurso la mitad de las 1.800 anunciadas para este ejercicio.

"Galicia tuvo, tiene y tendrá la voluntad de convocar la OPE dentro de los marcos legales establecidos", insistió ayer el conselleiro, que declaró que "lo mejor" es poder hacerlo con las cuentas estatales aprobadas. En caso de que estas no salgan todavía adelante en el Congreso, apuntó la opción de buscar "otro tipo de soluciones", aunque ni Xunta ni Gobierno central han especificado el motivo de por qué no podrían aplicarse las tasas de reposición del año pasado, pues el presupuesto de 2016 está prorrogado.

Todas las alternativas pretenden, según reconoció el conselleiro, evitar una ulterior invalidación de la OPE, lo que generaría "una frustración muy grande" en miles de opositores.

En esa línea de trabajo, el Gobierno central trabaja en la búsqueda de soluciones. "Nos consta que el Ministerio está trabajando y nosotros también; estamos a la espera de que se resuelva en el ámbito estatal esa situación", indicó en el Parlamento tras acudir a la presentación de una edición de los discursos de Feijóo.

Los sindicatos acuden a la reunión de hoy tras denunciar la incerteza producida, mientras la oposición considera un "chantaje político" la postura del Gobierno central, condicionando las ofertas de empleo a la aprobación del conjunto del presupuesto y mostrándola como culpable de la situación para lograr luz verde a su plan económico. Rodríguez incidió en una tesis que ya enarboló Feijóo la semana pasada y que ha sido señalada como causa, por ejemplo, del retraso adicional de otro año en la conclusión de la conexión de alta velocidad entre Galicia y Madrid. "Cada partido político debe ser responsable de lo que hace [?] Hay que pensar lo que se dice y pensar en que hay cientos de miles de jóvenes afectados", advirtió.

Doce comunidades, incluida Galicia, habían anunciado ya más de 8.600 plazas en su cuerpo docente para este año, si bien alguna como Extremadura ya las ha desconvocado. Cantabria decidirá qué hacer el día 15 y Euskadi publicó ya sus plazas para este ejercicio, que ascienden a 800.