Una empresa del CEO de Metalships proveerá un ro-ro a la Armada por 20 millones

El futuro buque de transporte logístico para el Ejército de Tierra llevará, una vez más, el sello del naval vigués. La mesa de contratación de la Jefatura de Apoyo Logístico de la Armada acaba de adjudicar el contrato por el que la unión temporal de empresas (UTE) conformada por Navaleva y Electromecánica Santana serán los proveedores de un ferri de hasta 155 metros y que empezará a prestar servicio oficial a principios del próximo año.

Navaleva es una sociedad limitada constituida en agosto de 2020 para “la gestión, organización y dirección de proyectos de construcción y reparación de barcos”, cuyo administrador único es el actual consejero delegado (CEO) de Metalships, Jesús Villacañas. El pasado 3 de noviembre amplió su objeto social para la “compraventa de buques o la participación en empresas que se dediquen a la compraventa de buques”, lo que le permite ejercer como broker. Electromecánica Santana, por su parte, se ubica en Teis, muy cerca de la antigua Factorías Vulcano.

El naval vigués, a la espera de la Armada para la reforma del nuevo barco logístico

Dado el apremio de la Armada para disponer de un barco de envergadura para el transporte, y para ahorrar en recursos, el Ministerio de Defensa prefirió optar por el mercado de segunda mano. Estrategia idéntica a la que siguió hace dos años cuando reconvirtió el buque ro-ro Galicia, de la naviera Suardíaz, en el Ysabel. Su transformación se realizó íntegramente en Vigo y en ella participaron empresas de Grupo Gestido o RP Reparaciones Navales. Ya entonces, Metalships & Docks asumió los trabajos de pintura de obra viva y obra muerta en su dique seco.

La operación se repetirá aquí, previsiblemente. De hecho, la misma sociedad de Villacañas ya se adjudicó un contrato similar el pasado mes de agosto, cuando fue la elegida para proveer a la Armada de un multipropósito offshore. En este caso el buque elegido ha sido el Ocean Osprey, que ya está siendo sometido a trabajos de pintura y reconocimiento de las líneas de propulsión en el astillero que dirige el mismo empresario vasco. El contrato para el ro-ro fue adjudicado por 19,49 millones de euros (de un tope de 21,5 millones). Fue la única propuesta evaluada por la mesa de contratación. No ha trascendido qué ferri será el que vaya a gradas para transformarse en el compañero del Ysabel.

En todo caso, no podrá superar los 155 metros de eslora y los 22 de manga. Tendrá que ser adaptado para poder acoger cargas como los vehículos de armamento pesado (tanques del Ejército de Tierra) Leopardo (62 toneladas) o Centauro (24 toneladas), además de 300 contenedores (50 de ellos, refrigerados). Tendrá que entregarse ya con todos los requisitos cumplidos el 28 de diciembre, como muy tarde, en el Arsenal de Ferrol.

El contrato

Navaleva repite

Es una sociedad de la que el CEO del astillero Metalships & Docks, Jesús Villacañas, es administrador único. Ya ganó el contrato para proveer a la Armada de un multipropósito offhsore, el Ocean Osprey. Puede actuar como broker.

Pareja del “Ysabel”

A día de hoy, solo el ro-ro Ysabel –antiguo Galicia de Suardíaz, reformado en Vigo– presta los servicios de transporte logístico a la Armada. Deberá entregarse en Ferrol el 28 de diciembre, como límite. No podrá superar los 155

A día de hoy, solo el buque Ysabel satisface las necesidades de Defensa para el transporte logístico vía marítima del Ejército de Tierra, aunque también realiza trabajos para el Mando de Operaciones (MOPS, responsable del planeamiento operativo, la conducción y el seguimiento de las operaciones militares) o la Unidad Militar de Emergencias (UME). De modo que, cuando el antiguo Galicia sube al carro para trabajos de “mantenimiento y navalización”, la Armada se queda sin capacidad logística.

Además de esta licitación, la Armada tiene otro procedimiento en marcha para la compra de un multipropósito. Este servicio lo presta hoy en día el Contramaestre Casado, construido en 1953 –comprado de segunda mano en el 83– y que, con lógica, “presenta serios problemas de obsolescencia que entrañan un alto riesgo de perder esta capacidad operativa”, asumen los mandos de la Armada en la memoria técnica del proyecto.

El más joven de los cuatro remolcadores de altura –Mar Caribe, MahónLas Palmas y La Graña– se entregó en 1988. Para este caso, el barco a comprar no podrá tener más de 15 años y 105 metros de eslora y habrá de ejecutar las misiones de “transporte logístico por vía marítima, remolque de altura y apoyo a al adiestramiento de las unidades de la Flota se realicen con agilidad, fluidez y seguridad”. Esta segunda unidad se entregará como fecha tope el 15 de diciembre en alguno de los arsenales de la Armada repartidos por la costa española.

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