El empleo público y la industria agroalimentaria son las ramas laborales que ganan más afiliados

La rama de la administración pública, sanidad y educación es la que ha ganado más afiliados a la Seguridad Social en las comarcas entre 2012 y 2022, los datos más recientes que maneja el IGE. Este crecimiento le permite recortar distancias con el sector del comercio, la hostelería y el transporte, que a su vez ha perdido altas pero continúan como principal actividad en casi todos los municipios.

En líneas generales, 20 de cada 100 trabajadores de cada municipio tienen una plaza en el empleo público. En Lalín, el porcentaje es del 22% (en 2012 era del 17,9), en Silleda, del 20,9 (17) y en Vila de Cruces, del 20,5 (16,9%). Ese incremento también se produce en los tres municipios menores de Deza: Agolada pasa del 14,9 al 22,2%; Rodeiro del 10,4 al 11,5 y Dozón del 12,4 al 14,4%. Precisamente en Camba y Dozón la administración pública no es la segunda rama de actividad, ni el comercio la primera, ya que en ambos predomina la afiliación a la agricultura: en Rodeiro el sector primario supone el 41,9% de las altas en la Seguridad Social, y en Dozón, el 40,6.

Nuevos horizontes para la industria agroalimentaria

Volvamos a los porcentajes de afiliación en el empleo público, pero en Tabeirós-Montes. En la cabecera comarcal, A Estrada, la cifra es del 26,6% (22,6% en 2017), en Forcarei, del 19,7 (14,5) y en Cerdedo-Cotobade, del 26,7. En 2012, el porcentaje de afiliación como trabajador público en Cerdedo era del 26,3.

Descensos en el comercio

Si por norma general la administración pública emplea en torno al 20% de los trabajadores de cada municipio, el porcentaje del comercio se mueve entre el 19% de afiliaciones de Rodeiro y el 31 en Cerdedo-Cotobade siendo, como decíamos, la principal actividad laboral salvo en Rodeiro y Dozón, pero con descensos en Lalín, donde pasa del 28,6% de las afiliaciones al 28,1; en Silleda, del 29,9 al 29,5%, o a Estrada, al descender del 32,1 al 30,1%. Ocurre lo mismo en Forcarei, donde sus afiliaciones descienden del 27,2 al 26,2%.

En cambio, sí sube la actividad comercial en diez años en Vila de Cruces, al pasar del 29,1 al 29,9% de altas; en Rodeiro, del 18,2 al 19,7; en Dozón, del 20 al 20,2; y en Agolada, del 25,1 al 25,7.

No está entre las tres actividades con más trabajadores afiliados de las comarcas, pero la industria agroalimentaria ha experimentado un tirón desde 2012. Puede ser fruto del aumento de emprendedores en el rural derivados primero tras la crisis del ladrillo y después tras el COVID. Así, su porcentaje de afiliación sube en todos los municipios salvo en A Estrada, donde si en 2012 contaba con el 3,4% de afiliados, ahora tiene el 3. En esta comarca, la industria agroalimentaria gana peso en Forcarei (del 2,1 al 3,2% de altas en la Seguridad Social) y en Cerdedo-Cotobade (del 1,5 al 3,3).

En tierras dezanas, la transformación de alimentos emplea al 5,2% de afiliados en Lalín (en 2012 era el 4,1), al 5,3 en Silleda (3,9) y al 3,7 en Vila de Cruces (3). En Agolada, la afiliación ha subido en una década del 4,6 al 5,9%, mientras que en Rodeiro la variación es del 7,2 al 9,9, y en Dozón, del 6,2 al 7.

Entre el sector inmobiliario y la construcción

Vemos que el comercio, la hostelería y el transporte se coloca, en líneas generales, como principal rama de actividad a la hora de afiliarse a la Seguridad Social, seguido por el empleo público. El tercer nicho de empleo ya varía más, según qué municipio. La construcción ocupa ese tercer puesto en Cerdedo-Cotobade, con el 11,5% de las afiliaciones, un tercer puesto que en a Estrada lleva el nombre de actividades de información, finanzas e inmobiliario, con el 11,5% de las altas en la Seguridad Social. Vimos que en Rodeiro y Dozón la tercera actividad laboral era el empleo público, y en los concellos restantes se impone la agricultura, con el 22,2% del total de afiliaciones en Agolada; el 12% en Forcarei; el 11,2 en Lalín; el 17,3 en Silleda y el 13, 5 en Vila de Cruces. A modo de apunte, un sector como el de la madera, papel y muebles en A Estrada baja del 6,1% de afiliaciones en 2012 al 2,8 en 2022, mientras que en ese periodo mejora sus cifras en Lalín: del 2,1 al 4,6%. Es una rama de actividad que también logra escalar altas en la Seguridad Social en Silleda (del 1,5 al 2,8) y que también duplica afiliados en Vila de Cruces, al pasar de 3,7 al 6,9% de altas.

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