El CHUS realizó 74 trasplantes el pasado año y registró 27 donaciones de órganos

El 63% de donantes eran hombres y el 37%, mujeres | El mayor tenía 85 años y el menor, 21, con una media de 61 | Doce pacientes están a la espera de un hígado y 37 de un riñón

El CHUS realizó durante el pasado año 74 trasplantes de órganos y registró 27 donaciones. |   // E.P.

El CHUS realizó durante el pasado año 74 trasplantes de órganos y registró 27 donaciones. | // E.P. / Koro Martínez

Koro Martínez

La actividad en cuanto a donación de órganos y trasplantes llevada a cabo durante el pasado año en el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) fue de un total de 27 donaciones y 74 trasplantes, según datos facilitados por el propio centro hospitalario.

En lo que se refiere a los donantes, en 16 de los 27 casos registrados se trató de fallecidos en muerte encefálica, mientras que otros once lo fueron en asistolia; es decir, por parada cardíaca en el hospital. Una cifra conjunta de donantes que desciende sensiblemente en comparación con la del ejercicio anterior, cuando se situó en un total de 38. En el caso de los de en asistolia, desde que el programa se puso en marcha en el Clínico en 2017, ha habido 58, dentro de un proceso complejo que se está consolidando en los últimos años y que posibilita recuperar el corazón de ese paciente para el trasplante.

Sobre el perfil de estas personas cuya acción altruista permitió salvar vidas de pacientes en lista de espera, seis de cada diez eran hombres, en concreto el 63% eran varones y el 37% restante mujeres. La causa de la muerte más frecuente fue la hemorragia cerebral, seguida del accidente cerebrovascular isquémico y la encefalopatía anóxica tras parada cardíaca. Con una media de 61 años, el donante de mayor edad de Santiago tenía 85, mientras que el más joven era de solo 21 años. Unos datos que elevan la media en tres años con respecto a 2022, cuando se situó en los 58 años. Entonces, el mayor tenía 88 años y el más joven contaba con 25.

En total, desde el Clínico compostelano se derivaron a otros centros hospitalarios 29 riñones, 10 pulmones, 1 hígado y 2 corazones.

En el apartado referido a los trasplantes, el CHUS llevó a cabo durante 2023 un total de 35 trasplantes de hígado, de los cuales uno fue combinado hepatorrenal, y otros 39 renales, siendo cinco de ellos de donante vivo. Se trata de un tipo de donación que es la única dirigida que aparece contemplada en el sistema sanitario español, y que en la mayoría de los casos se trata de personas con algún vínculo familiar o emocional con el receptor.

En 2022 hubo 32 trasplantes de hígado y 53 de riñón, frente a los 34 del año anterior en el primero de los casos y de los 40 llevados a cabo en el segundo. En la actualidad, hay doce pacientes del hospital santiagués en lista de espera para recibir un hígado, mientras que la cifra de los que precisan un riñón se eleva hasta los 37. En toda Galicia son 216, la mitad que hace una década, cuando el número era de 425.

Negativa familiar

La negativa por parte de la familia o allegados a realizar una donación se mantuvo el año pasado en un 15,6%, una décima porcentual por encima de la de 2022 y de la contabilizada el año pasado a nivel autonómico, si bien en este caso cabe destacar que el descenso en 2023 fue de nada menos que tres puntos con respecto al ejercicio anterior.

En su conjunto, el Servizo Galego de Saúde realizó en sus hospitales 331 trasplantes de órganos en 2023 frente a los 296 de 2022. En total, 9.548 desde que en 1981 se iniciara en la comunidad la actividad trasplantadora, con 3.400 donantes desde entonces.

Por lo que se refiere al Clínico, la cifra de donantes cadáver desde que empezó el programa en 1982 hasta finalizar 2023 fue de 801. En la primera década registrada no llegaban a la decena, número que se alcanzó en 1988 y 1990, pasando de los 5 del año de arranque a tan solo 1 el siguente. Ya en los noventa se experimentó un notable crecimiento en cuanto a donaciones, con 21 en 1993 y la coincidencia de que desde 1995 a 1999, ambos incluidos, se contabilizaron siempre 14 por ejercicio. En los 2000 el crecimiento fue aún mayor, destacando 2002, con 40 donaciones, si bien en toda la década se superaron ampliamente las dos decenas. Entre 2010 y 2020 hubo dos ejercicios que se quedaron por debajo de los 20, 2011 (19) y 2014 (18), siendo 2016 (30) y 2019 (35) los de mayor actividad.

Desde 2020, en el que irrumpió la pandemia, la oscilación ha pasado de los 37 donantes de ese año a los 25 del siguiente y 38 de 2022 para llegar a los 27 del pasado. Durante el último ejercicio la inmensa mayoría de los trasplantes a nivel autonómico lo fueron de riñón, con 168; seguidos de los de hígado (88), pulmón (49), corazón (22) y páncreas (4).

Una actividad de donación y trasplantadora que ha contribuido de forma muy significativa todas estas décadas a salvar vidas de pacientes para los que no había otra opción, y ante la que las autoridades sanitarias, tanto locales como autonómicas y estatales se empeñan en poner el acento en todo lo que ello conlleva, puesto que tanto el perfeccionamiento de las técnicas como la mejora de los fármacos permiten en la actualidad plantearse trasplantes que antes eran impensables.

Galicia tiene en estos momentos 124.285 personas poseedoras de la tarjeta de donante de órganos, 2.612 de ellos la estrenaron el año pasado.