Habrá nuevo pleno, y será el cuarto, para aprobar un suplemento de crédito de 168.000 euros con el que Vila de Cruces podrá pagar varias facturas. En los tres anteriores, la oposición se postuló en contra o se abstuvo por el mismo motivo: la falta de documentación en muchos de los servicios que deben ser abonados.

Ayer el alcalde, Luis Taboada, volvió a darse de bruces con los mismos requisitos que le pidieron ya los otros tres partidos para votar a favor: transparencia. Desde el PSOE, María del Carmen Silva recordó que el expediente sigue sin estar completo en el Gestiona y que apoyaría el suplemento de crédito si sacaba la factura de 4.235 euros a Roibás porque el único concepto que figura es “redacción de pliegos”, sin más detalle. Su compañero del BNG, Álex Fiuza, también recordó que esta empresa tuvo en su momento un contrato al principio del mandato para redactar pliegos de licitación, pero que solo sacó adelante el del SAF.

Álex Fiúza, portavoz del BNG, se dirige al alcalde, en un momento del pleno. BERNABE/JAVIER LALIN

A esta retirada de la factura, Carmen Silva sumó la del pago de horas de camión de Hormigones Deza por “un exceso de tiempo de descarga”, que Taboada explicó a que se debió al retraso de los operarios municipales, al estar en cuadro. Fiúza también propuso retirar la de Excavaciones Cebreiro, por 3.430 euros “por trabajos realizados” sin indicar tampoco el lugar”. Le echó en cara al alcalde que podía haber llevado ya al primer pleno sobre esta cuestión (el 27 de octubre) los albaranes por las 97 horas de camión de Factorillos.

Ambos partidos recordaron, una vez más, que urge sacar contratos que llevan caducados años (ya desde el mandato del PP) para ahorrar dinero, y que es preciso también un informe de necesidad para coordinar las obras. Y a poder ser, consensuar estas con la oposición, más que nada porque son 9 concejales frente a solo 3 del gobierno de Xuntos.

Taboada, impasible, atajó las críticas de Silva con un “el mejor informe de necesidad es el que el trabajo está hecho”, y a Fiúza le mostró desde su asiento, los albaranes de trabajos realizados en Salgueiros, Piloño o Carbia. De nada sirvió que el portavoz del Bloque le recordase que esos informes de necesidad pueden ser redactados por técnicos municipales, sin suponer ningún coste a mayores.

Sin luz

Desde las filas del PP, Manuel Souto incidió en la falta de documentación de las facturas, y que para cualquier suplemento de crédito, primero hay que tener una relación de obras. Por su parte el exalcalde Jesús Otero quiso que Taboada le aclarase si en el muro de contención de Larazo se tocaron propiedades privadas, “y tenemos constancia de que algún hormigón se destinó a zonas privadas” en otras obras.

Iba a preguntarle a la interventora cuál será su postura si las facturas siguen sin documentación adjunta, cuando de repente el salón de plenos se quedó sin luz ni conexión a internet. No pudimos verlo, pero sí continuó 20 minutos más.

Antes de votar el teniente de alcalde, Julio López, le preguntó a Jesús Otero si tres de sus concejales que en el anterior pleno se abstuvieron (Manuel Souto, Diego Pallares y José González) se habían pasado al grupo mixto o aún pertenecían al PP. López dejaba así en evidencia la posible lista alternativa de estos ediles. Souto respondió con un “¿a ti qué te importa?”. Fue después López el que dio la callada por respuesta cuando Fiúza le interpeló si aún tenía el carné del PP.

Al final, los tres ediles del BNG y la del PSOE votaron en contra, ya que Xuntos no retiró las facturas que le pedían. Los tres ediles del PP volvieron a abstenerse, mientras que el cuarto, Jesús Otero, dijo que votaba “como en el pleno anterior” pero, al no levantar la mano, también fue abstención. Así que con 4 en contra y 4 abstenciones, de nada sirvieron los 3 a favor de Xuntos. Y ayer no acudió Laura Rey, del PP.