Por enésima vez, el cauce del Deza baja cubierto de espuma. Ayer domingo, el río presentaba una tremenda capa blanca a su paso por el área recreativa de A Carixa, en Vila de Cruces. Ya el sábado a media tarde, fueron alertados Policía Local, Policía Autonómica, técnicos de Augas de Galicia y agentes medioambientales por el aspecto blancuzco que presentaba el tramo de ocho kilómetros de ríos entre Botos y Ponte Taboada. Agentes del Seprona estaban en esos momentos colaborando en las batidas de búsqueda de Carlos Ares, el vecino de A Bandeira que fue encontrado muerto cerca de la villa a última hora de la tarde.

La Policía Local emitió un informe, acompañado de fotos, sobre el incidente. Desde Aprafoga (la Asociación Profesional de Axentes Forestais de Galicia), aseguran que el vertido procede de la depuradora de Botos, que impacta bastante a la vista pero que sin embargo no produce mortandad en los peces. Agentes del Seprona, por otra parte, recorrieron ayer el tramo desde Botos río abajo para confirmar que el agua ya corría limpia.

Sin embargo, desde el Concello indican que el vertido no procede de la EDAR de Botos, y recuerdan que desde Botos hasta A Carixa se cuentan las dos depuradoras de gestión municipal de Silleda así como otras que prestan servicio a empresas. Espina y Delfín explicó al gobierno local que el sábado por la mañana realizó su habitual control de la EDAR de Botos, y no halló incidencias. Por la tarde, al ser detectado el vertido, se desplazó a la depuradora de Botos la empresa Punto Control y Vertido (PCV) para realizar catas tanto en la salida de la depuradora al río como en el tanque de flotación y en la entrada de agua bruta, sin hallar nada que tuviese que ver con el vertido, indican desde el Concello.

Fuentes municipales descartan que el vertido procediese de Botos un sábado, en el que el polígono está sin actividad. Se agarran también al argumento de que tal cantidad de espuma, de proceder de la EDAR, tendría que llegar diluida a la zona de A Carixa, que queda unos 30 kilómetros más abajo.

Segundo en un mes

Este es el segundo gran vertido que se produce en apenas un mes en aguas de la comarca. El pasado 2 de junio un particular alertó de un vertido sobre el Asneiro (afluente del Deza), en las inmediaciones de la EDAR de Botos. A la espera de aclarar de dónde procede el vertido, hay que recordar que la depuradora de Botos obliga a pagar al Concello, desde hace años, multas por vertidos a los cauces: en 2020 hubo que abonar 5.000 euros por un vertido no autorizado y a a raíz de una denuncia formulada en 2018. A mediados de 2019, Augas de Galicia impuso otra sanción, por un vertido de 2017, de 2.500 euros.