"La Unión Europea se enfrenta al gran reto de permanecer unida después de esta terrible crisis". Así interpreta las tiranteces entre algunos de sus estados miembros y la insolidaridad de algunos respecto a los que en estos momentos precisan más que nunca de acuerdos de calado. En este sentido destaca el destacado papel del grupo socialista europeo y de los gobiernos de países como España, Portugal, Italia o Suecia "para forzar una respuesta sanitaria global" y destaca el papel del dirigente luso Antonio Costa.

Pesca

Casares asegura que ve con esperanza como esta feroz crisis diferirá de la de 2008, pues entonces Europa tardó unos dos años en tomar medidas "y ahora en un mes aprobamos muchas, entre ellas, un seguro de desempleo europeo o medio billón de euros en mecanismos de estabilidad, además de la barra libre del Banco Central Europeo". "En esta crisis no va a haber hombres de negro, no se cometerán esos errores", señala. En clave doméstica remarca la aprobación de medidas, en el pleno de mañana, de decidido respaldo al sector pesquero.

Los gobiernos neoliberales como el holandés o el grupo conservador alemán son, a su criterio, escollos para que esta reconstrucción social y económica se articule desde las solidaridad. Pero Casares advierte de que en Europa es determinante el diálogo y la negociación continua. Por último, lamenta declaraciones como las de la popular Cayetana Álvarez de Toledo. "Dijo que el presidente Pedro Sánchez era poco menos que un pedigüeño, pero lo que hizo, como Enmanuel Macron [presidente de Francia], fue luchar para salvar Europa".