La Gerencia de Gestión Integrada de Santiago activa la Unidad del Suelo Pélvico, que ya está funcionando en el Hospital Clínico y próximamente abrirá la consulta en A Barbanza. La unidad está integrada dentro del servicio de rehabilitación, cuyo responsable es el doctor Jesús Figueroa, y formada por médicos rehabilitadores y fisioterapeutas especializados en la rehabilitación de las disfunciones del suelo pélvico, sobre todo, de la incontinencia urinaria. La patología requiere un abordaje interdisciplinar en el que participan, además del servicio de rehabilitación, especialidades como urología, ginecología y cirugía general.

Para la puesta en marcha de esta unidad se dispone de personal altamente calificado en la valoración y tratamiento de este tipo de patología, y las consultas ya están dotadas de tecnología de última generación que permitirá ser referentes en el área de la rehabilitación de las disfunciones del suelo pélvico. Sus patologías, y más concretamente, la incontinencia urinaria, suponen un problema relevante, sobre todo en la mujer, con un gran impacto personal y social y que influye de forma muy notoria en la calidad de vida de los pacientes que la padecen.

Podrán beneficiarse de estas consultas, además de aquellos pacientes que presenten diversas disfunciones del suelo pélvico, fundamentalmente mujeres con incontinencias urinarias leves y moderadas (de esfuerzo, de urgencia o mixta) y mujeres con prolapso vaginal leve. La incontinencia urinaria se define como la condición en la cual la pérdida urinaria constituye un problema higiénico y social, e incluye una demostración objetiva de la pérdida de orina y una valoración subjetiva de su impacto.

El Observatorio Nacional de Incontinencia (ONI) indica que la prevalencia media estimada para las mujeres es del 24%, aumentando al 30-40% en las de mediana edad y hasta un 50% en las ancianas. Su abordaje terapéutico comprende medidas higiénico sanitarias, tratamiento farmacológico, técnicas específicas de rehabilitación pelviperineal y técnicas quirúrgicas.

La rehabilitación del suelo pélvico posee una alta evidencia científica en relación a su efectividad terapéutica. Algunas de las técnicas más utilizadas son: electroestimulación, biofeedback, terapia manual, neuromodulación del nervio tibial posterior, gimnasia abdominal hiopopresiva, técnicas miofasciales, técnicas de rehabilitación intervencionista y tratamiento de grupo para enseñanza de ejercicios de tonificación de la musculatura del suelo pélvico. De manera complementario se lleva a cabo un seguimento de hábitos y actividades de los pacientes con fin de indicarles consejos que contribuyan a la resolución del problema.