Paula Fernández Pena y Matías Rodríguez Da Torre concurrirán a las elecciones municipales de 2011 como candidatos de las listas de PSOE y BNG en Silleda. Las ejecutivas de los dos partidos refrendarán estas dos propuestas en sendas asambleas previstas para después del verano, con la intención de comenzar a trabajar en la recta final del año en la confección de las listas electorales y la precampaña, que se antoja intensa en un municipio con no pocos sobresaltos políticos.

El liderazgo de Pena es, a día de hoy, incuestionable tanto para la dirección del partido como para las bases de Silleda, que la consideran uno de sus principales activos para reconquistar la alcaldía. La ex alcaldesa y sus equipo están obligados a realizar una importante renovación de su lista para evitar nuevos casos de transfuguismo, que los apartaron del poder tras apoyar la censura impulsada por ediles del PP. La pérdida de la alcaldía incluso supuso, para Pena, una revalorización en el seno de la dirección autonómica del PSOE y también en el municipio. Una demostración de esta fuerza se certificó en la comida celebrada hace semanas en A Bandeira, en la que los socialistas convocaron a más de un millar de ciudadanoos y simpatizantes. Además de la ex alcaldesa, tendrán un valor preponderante en la lista; el edil de A Bandeira Manuel Cuiña, su mano derecha, y la ex concejala de Servizos Sociais Dolores García. Y entre las caras nuevas se postula como uno de los reclamos electorales el presidente de Xuventudes Socialistas, Klaus Brey, que participó activamente en la movilización social en contra de la censura, aún sin ostentar la dirección de la agrupación juvenil.

En el caso del BNG, el partido considera a Da Torre como el aspirante idóneo, una vez que tomó posesión como edil nacionalista el año pasado, pero en este tiempo se ha valorado el trabajo que desempeñó en la oposición; más si cabe a ser el único representante de la formación frentista en la corporación.

El BNG tiene la complicada tarea de incrementar su representación municipal en una campaña que podría presentarse muy polarizada por PP y PSOE, que son los que parten con serias opciones de gobernar. Fuentes solventes del Bloque indican que apostarán por una renovación del partido para conseguir arrancar más votos que los ya consolidados entre su electorado. Los nacionalistas tienen la asignatura pendiente, como ocurre en otros municipios gallegos, de lograr que su trabajo en la oposición sea valorado por sus vecinos. Por lo tanto, el diseño de la campaña será, en parte, clave para conocer el recorrido de un partido que tiene desde hace años el respeto de la ciudadanía pero que en las municipales de 2007 llegó a ceder un escaño. La asamblea del partido nacionalista aplazará, en principio, hasta el otoño la designación pública de un candidato y una lista que puede ser clave para formar gobierno en Silleda.