A Estrada es cuna de personajes ilustres, de gentes que escribieron su nombre con trazo firme y en mayúsculas en las páginas de la historia gallega. Todavía a día de hoy es posible seguir los pasos de algunos de estos aclamados estradenses hasta encontrar sus raíces. Tomarlos de la mano y caminar hasta la puerta de las casas en las que nacieron o vivieron, los hogares en los que se refugiaban para idear sus grandes obras, la lumbre que avivaba su musa interior, el paisaje al que se abrían sus ventanas y que, sin poder ni querer evitarlo, acabaría fotografiándose en sus creaciones.

La Asociación de Escritores en Lingua Galega acaba de realizar un inventario, en colaboración con la Dirección Xeral de Patrimonio, de las casas en las que nacieron o vivieron durante un determinado período de tiempo los escritores gallegos. Su objetivo es proteger estas construcciones, abriéndose con esta catalogación de casas, pazos y edificios la posibilidad de que estas construcciones adquieran en un futuro la categoría de Bienes de Interés Cultural, con la consiguiente protección que esta distinción conlleva. En el caso del Concello de A Estrada, este estudio incluye tres construcciones, dos vinculadas al célebre Manuel García Barros "Ken Keirades" y otra a Marcial Valladares Núñez.

Las viviendas relacionadas con García Barros, que nació en el año 1876 en la parroquia estradense de Berres y en el seno de una familia de labradores, se localizan en el lugar de Ulla (Berres) y en Pousada, en la parroquia de Callobre. El citado inventario atribuye a la primera un buen estado, considerándolo regular para la segunda de estas construcciones, con planes para acoger reformas en la casa. Ken Keirades comenzó siendo pastor y tornero y estudió Magisterio en Santiago. Posteriormente ocuparía la plaza de maestro en Rubín y contraería matrimonio en Callobre, donde vivió el resto de su vida y donde murió en 1972. Dejaría para la historia joyas únicas como sus "Contiños da terra".

En cuanto a Marcial Valladares, la catalogación realizada por la Asociación de Escritores en Lingua Galega contempla el Pazo de Vilancosta, en la bajada de Berres hacia el Ulla. El inmueble se encuentra en buen estado e identificado como el lugar en el que pasó sus días el autor de la primera novela moderna escrita en lengua gallega ("Maxina ou a filla espúrea") y artífice de un diccionario gallego-castellano con 11.000 vocablos, recogidos entre 1850 y 1884.

Como queda indicado, dos placas señalizan el paso de estos célebres autores por estas viviendas y estas tierras. El estudio efectuado incluye la aportación estradense entre las más de 90 casas localizadas. La asociación realizó este inventario durante tres años, fotografiando las fachadas y confeccionando fichas de las moradas y casas natales de los grandes literatos de las letras gallegas.