Desde que llegó al Pontevedra este verano, Adighibe se ha convertido en uno de los futbolistas más queridos por la afición granate. Su complexión física, su velocidad y su potencia han sido la gran sensación desde la pretemporada, pero si por algo se ha ganado a la parroquia de Pasarón ha sido por su carácter. Es indudable que el delantero nigeriano tiene carisma. Siempre sonriente, siempre trabajador y siempre pendiente de agradar a los hinchas, cumple a la perfección con el perfil de futbolista que gusta en la Boa Vila.
Adighibe es la debilidad de muchos aficionados del Pontevedra, y eso a pesar de que no está destacando especialmente por sus cifras goleadoras. Pero el domingo, en la visita al Las Palmas Atlético, el delantero firmó uno de sus mejores partidos desde que viste de granate, devolviendo a los suyos el olfato goleador después de dos jornadas sin anotar, y lideró la remontada del equipo para sumar tres puntos de oro que dejan a los de Carlos Pouso en sexta posición, a solo cuatro puntos de un play off que marca su próximo rival, el Rayo Majadahonda (sábado, 19.00 horas, Pasarón).
El "nueve" granate marcó el gol de la victoria en Gran Canaria, y puede que también el del empate, o quizá no; el colegiado se lo dio en el acta del partido a Berrocal, pues la jugada es dudosa y no está claro si el nigeriano llega a tocar la pelota o no, aunque él lo tiene claro: "La toqué yo, pero el árbitro dice que fue Berrocal. Pero no pasa nada, es mi compañero y lo más importante son los tres puntos", afirma Adighibe, que insiste en que "lo más importante fue ganar fuera de casa en un campo muy complicado".
Con el 1-2 no hay dudas, como tampoco las hay con la media chilena que estrelló en el larguero cuando todavía no se había alcanzado el minuto 20 de partido. "Pensaba "si este gol entra, es otro nivel", pero no pasa nada", bromeaba el delantero tras el entrenamiento de ayer. No es la primera vez que intenta un remate así con el Pontevedra, quizá pronto podrá repetir el espectacular tanto que marcó la temporada pasada, con el Unión Adarve, al Deportivo Fabril, que dio la victoria a su equipo y se convirtió en uno de los más bonitos del año: El nigeriano recibió un centro desde la banda izquierda, lo controló de espaldas a la portería, elevó el balón y marcó con una vistosa chilena.
Aunque para Adighibe sus mejores actuaciones con el Pontevedra fueron a comienzos de liga, el encuentro en Gran Canaria ha sido uno de los mejores desde que viste de granate, no solo por haber marcado el gol de la victoria -el cuarto en su cuenta particular-, sino también por su aportación en diferentes facetas y por liderar la reacción tras haber encajado el 1-0. "Yo siempre creí en que íbamos a ganar el partido. El equipo estuvo perfecto, todo el mundo tenía hambre de pelota, de correr, de robar... todos estábamos trabajando mucho", afirma el delantero, que explica que "el partido empezó un poco regular, también es normal, porque el campo era complicado y fuera de casa siempre cuesta más".
Querido en la ciudad
Desde su llegada a Pontevedra, Adighibe ha sentido el cariño de la afición granate, que se vuelca con el nigeriano en cada partido, aunque él considera que "no solo me dan cariño a mí, también a todo el equipo, los jugadores nos sentimos muy cómodos en Pasarón". Pero no solo en el campo es querido el nigeriano, sino que también sus vecinos le muestran su cariño por las calles de la ciudad, saludándolo afectuosamente. "Es normal, es algo del mundo del fútbol", dice "La Pantera", que asegura estar "muy contento" en Pontevedra.
Y es que el delantero tuvo un flechazo con el equipo granate la temporada pasada, cuando se enfrentó a él con el Unión Adarve y comprobó la comunión entre plantilla y afición. "Hay que estar bien con todo el mundo, nunca sabes dónde estarás mañana. Cuando jugué contra el Pontevedra el año pasado estuve bien con todos y ahora estoy aquí", recuerda.
