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fútbol sala - Primera división

Iglesias, vivir en la indiferencia

"Hace tiempo que desconecté, ni quiero ni creo que debamos volver a jugar", subraya el técnico del Envialia

Gonzalo Iglesias, ayer visionando una serie sobre el jugador de baloncesto Michael Jordan. // Carlos Peteiro

Hace ya unos cuantos días que la Federación española hizo pública su propuesta con la que acabar la temporada en el fútbol no profesional, pero también en el fútbol sala. En el primero de los deportes, en Segunda B y Tercera, las categorías que son de su jurisdicción, no habría descensos y los cuatro primeros de cada uno de los 22 grupos, 4 en una, 18 en la otra, disputarían una Final a Cuatro en una sede única con el salto de categoría como premio para los campeones (con el paso del tiempo han ido saliendo otras opciones, ganando fuerza la de subir los primeros de forma directa); en el segundo de los deportes tampoco habría descensos, pero en el caso de la Primera división, al no poder subir más arriba, quedó en el aire si los cuatro mejores se disputarían el título con idéntico formato exprés. En esa situación está un equipo ourensano, el Envialia, que como todos espera acontecimientos.

"Sabemos lo que todos, lo que salió, esa propuesta de la Federación. Sabemos que no habría descensos pero sí ascensos, lo que nos provoca dudas porque de nuestro caso nada se habló, en nuestro caso no estamos hablando de subir, estamos hablando de jugarnos un título de liga. El tema me produce indiferencia, como ni tengo poder de decisión ni puedo manejarlo es mejor esperar", detalla Gonzalo Iglesias, el entrenador del Envialia.

Mucha Segunda B, mucha Segunda B Pro, algo menos de Tercera pero nada del fútbol sala. ¿Se sienten ninguneados? "Ya estamos acostumbrados, es una pena que no se hable más de nosotros. No somos el deporte rey, pero sí estimo que merecemos más atención".

"Al tercer o cuarto día de conocer esa propuesta, la verdad es que desconecté, lo que tenga que ser será. Durante todo este tiempo, el equipo sigue con la dinámica de grupo, de otra manera bien diferente pero con su dinámica, las jugadoras continúan con los microciclos de preparación física, las encargamos películas con trasfondo deportivo... Llevamos mes y medio sin vernos las caras, claro, pero la convivencia telemática está siendo positiva. Tenemos muchas dudas, muchas preguntas, mucha incertidumbre. Todo son hipótesis", relata.

"Ni quiero ni creo"

Según algunas informaciones, la Federación anunciará esta semana su decisión definitiva. ¿Quieren volver a jugar? "Ni quiero ni creo que deberíamos, la salud debe primar sobre todo lo demás. Estamos muy al principio de la desescalada, pero sigo observando que como sociedad continuamos incumpliendo las normas".

Pero ¿y si deciden que se juega un play off por el título? Tendrían que presentarse, ¿no? O al menos valorarlo... "Hombre, si nos obligan, tendríamos que jugar. Pero creo que no es eso lo que van a decidir. En ese escenario, tendríamos que hablar entre todos, con el club, con las jugadoras, muchas de ellas acaban contrato a primeros de junio, algunas incluso este mes. No, no lo veo".

En ese hipotético play off por el título habría dos equipos madrileños y otros dos gallegos. Dado que la Comunidad va más retrasada en la desescalada, ¿se imagina que se jugase en Ourense? "Sería fantástico, aunque lo más justo sería que se jugase en el campo del equipo que ha ido primero toda la liga, y ése es el Atlético Navalcarnero. Qué menos que ese premio cuando se ha jugado casi el ochenta por ciento de la liga. Además, sería un sinsentido que no se pudiese jugar en Madrid y sin embargo vinieran equipos de allí".

Total, que lo que era una temporada cercana a la matrícula se ha quedado en un 'coitus interruptus'. ¿O no tanto? "Puede ser, yo me quedaría con lo que hemos hecho, un año buenísimo que tiene el lunar de la Copa. Considero que en la liga hemos estado muy por encima de nuestras posibilidades, apenas hemos fallado en toda la temporada. Si no hubiésemos perdido el último partido contra el Poio, habríamos llegado a Burela sólo tres puntos abajo a falta de siete jornadas. En la liga sí podríamos hablar de matrícula, va a ser difícil igualar estos números; en la Copa fallamos y nos quedaba la autonómica, habíamos sacado un buen resultado en la ida... Vamos a dejar la temporada en un notable alto".

La última vez que hablamos andaba usted muy molesto con los que bajaban todos los días a comprar el pan, ¿se le ha pasado? "Es lo que hay, al menos convencí a mamá. Yo llevo 50 días metido en casa, todo el ejercicio que hago es subir y bajar escaleras a las nueve y media de la noche. Así es como creo que debe ser, es lo que nos mandaron hacer. El pan se puede congelar, también hay de molde. A veces pienso que no somos conscientes que el retorno a la normalidad va a ser mucho más difícil de lo que pensamos", acaba.

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