El Alondras cede el quinto puesto

El Estradense prolongó ayer su buena racha de juego y resultados con una trabajada victoria ante el Alondras. El 2-0 final esconde un partido duro, marcado por las intensas lluvias, el granizo y el viento. Este último sopló a favor del equipo del Morrazo en una primera parte en la que fueron superiores y acumularon ocasiones malgastadas ante la meta de Isra. En la segunda parte, todo cambió. David Páez movió el banquillo y los cambio dieron un nuevo aire a un Estradense que ofreció su mejor versión para desdibujar a un desaparecido Alondras.

A los rojillos les tocó sufrir en una primera parte en la que los visitantes jugaron muy cómodos. El Alondras se hizo con el mando en la medular e impuso su juego combinativo y la velocidad de sus hombres de banda, quienes recibían continuamente en posiciones ventajosas. Cabe destacar la buena actuación de un activo Monroy, quien se peleó y en muchos momentos salió vencedor en sus duelos con los centrales locales. Al Estradense por su parte no le quedó más opción que aguantar el chaparrón, literal y metafórico que se le venía encima, jugándose gran parte del primer asalto en su campo.

Monroy crearía la primera oportunidad clara al cuarto de hora, con una buena jugada en la que terminó cediendo para Iker. Su disparo franco se fue arriba. Poco después el mismo Iker pudo marcar en un córner en el que el balón quedó muerto en el área. La más clara sin embargo fue para Monroy, en una jugada con varios rechaces en la que terminó rematando con clase desde la frontal. Su disparo, con Isra ya batido, terminó golpeando en el palo. Iker completaría poco después su trío de ocasiones falladas. Esta vez remató a portería, pero Isra detuvo su cabezazo sobre la línea.

El Estradense terminaría asomándose por la meta del Alondras en los minutos finales de la primera parte y a punto estuvo de aprovechar su momento. Porrúa, uno de los mejores en el bando local, estrelló un lanzamiento de falta en la escuadra de Ruiz Díaz en una clara oportunidad.

A pesar de ese buen sabor de boca final, las cosas no iban bien para los rojillos. Así lo entendió Páez, quien cambio su propuesta para dar entrada a Migui en el extremo, quitando al lateral Óscar. Esa modificación tardó poco en justificarse, ya que Migui marcó en el primer balón que tocó. Una jugada por banda terminó en un pase atrás de Ángel que el centrocampista envió a la red con un gran disparo.

Con el partido en desventaja, el Alondras se estiró, probando en un par de ocasiones a Isra. La más clara llegó con un remate de Ube que el meta local envió a córner cuando entraba pegado al poste. El paso adelante de los visitantes regaló sin embargo el espacio que necesitaba el Estradense para buscar la contra y más tras la entrada de Elías para cerrar espacios en la medular. Un Porrúa en estado de gracia disparó al palo en una de ellas. La jugada estuvo a punto de repetirse poco después con una contra iniciada por Porrúa en la que Juanín terminó estrellando el balón en el palo. Esta vez sin embargo Elías llegó desde segunda línea para marcar en el rechace a portería vacía.

Con el partido en su mano, el Estradense se limitó a controlar el tiempo ante un Alondras incapaz de generar peligro. Los locales pudieron ampliar su cuenta a la contra, malgastando varias oportunidades claras.