El sueño del Defensores do Morrazo se hizo realidad en Santiago de Compostela. El conjunto cadete dirigido por José Luis Mejuto logró subir a la Primera División Autonómica después de haberse impuesto al Frigomar Burela por 79-44 en las eliminatorias por el ascenso. La escuadra morracense logra de este modo un hito histórico después de haber rubricado una fase prácticamente perfecta en la que se ha mostrado netamente superior a los rivales a los que le ha tocado enfrentarse.
Mejuto ha dirigido a una plantilla integrada por Luca, Markus, Nico, Eloi, Javi, Manu, Iván, David y Antón, que ha tenido un comportamiento excelso, ratificado con el triunfo de ayer en la pista del pabellón de Fontiñas.
El Defensores inició la fase de ascenso con victoria ante el Peleteiro, el que por tradición y juego era a priori su principal rival. Lo doblegó por 55-46 en el encuentro disputado en el pabellón de Domaio. En la segunda jornada los moañeses se desplazaron a Rianxo para obtener la victoria más contundente de todas, un 35-107 que lo dejaba a las puertas de clasificarse para la fase final, algo que hizo tras imponerse por 62-26 al Maristas de A Coruña. Ayer puso el broche de oro a estas eliminatorias con un nuevo triunfo.
