Carmen Escariz e Iria Rivas buscan una plaza para el Europeo en Córdoba

Las internacionales Antía Chamosa, de la Gimnástica de Pontevedra, y la estradense Carmen Escariz, del Ourense Atletismo, serán las abanderadas gallegas en el campeonato de España de los 20 kilómetros que se disputará en Córdoba el próximo domingo. Tanto para la mundialista en Omán del año pasado –que viene de superar una lesión de isquio–, como para la pontevedresa bronce europeo Sub23, este será uno de los primeros test importantes de esta temporada. En la cita nacional también estará presente la estradense Iria Rivas. En ambos casos su objetivo es similar, conseguir una plaza con España para los campeonatos europeos.

Rivas llega a esta cita en lo que califica como el “mejor momento de forma” de toda su carrera deportiva. La estradense se trasladó este curso a Murcia, donde forma parte de un reconocido grupo de trabajo en el mundo de la marcha bajo la tutela del entrenador José Carillo. “Son entrenamientos exigente y al final acabas como una moto. A lo mejor en una semana hacemos más de cien kilómetros”, explicaba ayer la estradense al analizar su preparación en los últimos meses y sus sensaciones con vistas al Nacional de Córdoba.

Su meta es pelear por conseguir una plaza para el Europeo que tendrá lugar en Finlandia, formando parte de la Selección Española Sub-23. Este campeonato de España cuenta con plazas de clasificación directa, por lo que las tres mejores en meta dentro de su categoría tendrán plaza asegurada. A mayores debe realizar la marca mínima, aunque apunta a que las mejores estarán en ese tiempo. “Hace poco estuve cerca de conseguir esa marca y aquí va a ser una carrera con mucha rivalidad. Yo diría que esas tres plazas nos las vamos a jugar seis atletas, así que el ritmo va a ser muy exigente. La marca mínima se va a hacer”, manifestó la estradense, quien ya sabe lo que es representar a España en un Europeo.

Carmen Escariz por su parte llega a este Nacional con muchas dudas por despejar tras un año marcado por los problemas físicos. Tras su traslado para poder trabajar con el grupo de tecnificación de Madrid, la estradense tardó en encontrar buenas sensaciones físicas, una falta de continuidad que le acabó afectando a nivel psicológico. Superada esa etapa, Escariz fue recuperando sensaciones, hasta que una lesión en un isquio la obligó a parar. “Llego algo justa de preparación pero con muchas ganas. Estas semanas pude entrenar bien y eso me anima a hacer un buen papel”, afirmó al tiempo que se marcó un objetivo ambicioso, lograr la mínima para estar en la Copa de Europa de mayo con la selección española. Para ello tiene que bajar de 1 hora, 35 minutos y 30 segundos. “Habrá plaza para las cuatro primeras. Será complicado estar entre ellas pero alguna puede que renuncie para centrarse en los 35 kilómetros, así que tengo que intentarlo”, afirmó la mundialista estradense.