Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

escalada

El muro más alto

Excelentes resultados de los jóvenes escaladores indoor de Montañeiros Celtas pese a la falta de instalaciones en Vigo

Montañeiros Celtas: escaladores de muros... y penurias

Desde la izquierda: Gael, Mara, Lucía, Xián, Juan y Xoel; al lado, Mara y Xián, entrenándose en Sárdoma. JOSÉ LORES FOTO: JOSÉ LORES | VÍDEO: R. V.

Para ver este vídeo suscríbete a Faro de Vigo o inicia sesión si ya eres suscriptor.

Desde la izquierda: Gael, Mara, Lucía, Xián, Juan y Xoel; al lado, Mara y Xián, entrenándose en Sárdoma. JOSÉ LORES Armando Álvarez

Han heredado una tradición ya octogenaria y la prolongan. Los escaladores jóvenes de Montañeiros Celtas están cosechando excelentes resultados a nivel gallego y español. Brillan en indoor como sus antecesores al aire libre pese a subir con lastre. No los limita el techo, sino la carencia de instalaciones. El estreno del rocódromo del pabellón de Quirós apenas ha paliado sus penurias. Aún deben desplazarse a Lugo para trabajar de manera adecuada ciertas modalidades. Santiago, Ourense o A Coruña disponen de mejores escenarios. “La gente se va concienciando de que necesitamos más medios para progresar”, afirma, más como anhelo que como diagnóstico, Juan Correa.

El alpinismo gallego moderno nació con Montañeiros Celtas en 1942. Lo parieron pioneros como los hermanos Veiga. Aquellos aventureros exploraban las cuevas más laberínticas igual que las alturas más inaccesibles. La escalada se convirtió pronto en una de las especialidades con mayor predicamento entre este y los demás clubes vigueses. Desde los años sesenta, cuando el sol asoma en primavera, sobre las paredes de Budiño, O Galiñeiro, Monteferro y Cabo Home bullen las arañas humanas.

Nunca ha menguado esa pasión. La meteorología condiciona el calendario de actividades, sin embargo, y el progreso ha ofrecido alternativas. La práctica de la escalada deportiva indoor se ha disparado en los últimos años. “Desde 2015 la explosión ha sido absoluta”, confirma Fernando Fernández Rey, vocal en la directiva de Montañeiros. En esta fiebre ha influido su inclusión en el programa olímpico. España ya cuenta con un ídolo. En Tokio, Alberto Ginés logró la medalla de oro.

“En Francia, Suiza o Austria ya llevaban más años. Forma parte de la educación en los colegios”, explica Fernández. Montañeiros apuesta por esa misma vertiente en sus escuelas. Más de 40 niños y jóvenes, entre 8 y 17 años, participan. “Trabajamos de una forma pedagógica el tema físico y mental, la seguridad, la concentración... Va muy bien para la educación integral”.

No es solo pasión infantil. El entrenador Eloy Suárez ha detectado que “el mayor interés, en este boom, lo encontramos entre personas de 20 a 40 años. Para los chavales dependemos de las facilidades, la promoción, las actividades extraescolares... Si no tenemos dónde practicar, no se puede ofertar”.

Mara y Xián, durante su entrenamiento en Quirós. JOSE LORES

Las instalaciones no han crecido al ritmo de la demanda. En la sede de Montañeiros disponen de un pequeño muro para iniciar a los más pequeños. Un socio del club construyó el rocódromo de As Travesas, ya en desuso por falta de homologación. Existen empresas privadas, como Mapache y MG12, donde se puede practicar la escalada en bloque –a poca altura, sin cuerdas, cayendo sobre colchoneta–. Peña Trevinca usufructúa una pared en el pabellón del CUVI...

La apertura de un rocódromo municipal es una vieja reclamación del montañismo olívico. Desde su inauguración en octubre, el pabellón de Quirós ofrece uno de sus fondos. Regentan sus horarios Montañeiros Celtas, Alud y en menor medida Peña Trevinca. Pero no colma lo necesario. A la altura, 12 metros, le faltan al menos dos para la escalada en velocidad. En dificultad se tienen rutas hasta 7B, según la escala francesa. En dos meses los jóvenes “ya se saben de memoria las más complicadas”, certifica Eloy.

Seis son los “celtas” que ya están compitiendo. Eloy adoctrina a Xián Peláez, Juan Correa, Lucía y Xoel Lores; José Juan Rodríguez se encarga de Mara y Gael Rodríguez. “Tienen un nivel muy alto, que hace mucho que no se veía. Se nota el trabajo en las escuelas”, valora Eloy. “Aunque distintos entre ellos, destacan por su constancia”.

Los datos confirman la calidad de esta generación. En Galicia existen más de cien clubes alpinistas, cierto que con muy diferentes enfoques. De los doce convocados por la selección gallega, cinco pertenecen a Montañeiros. Lucía quedó cuarta en velocidad en el Campeonato de España por autonomías; Juan, quinto en el sub 16; Mara ha sido quinta en la primera prueba de la Copa de España de dificultad sub18, primera en la tercera de velocidad y cuarta en el Campeonato de España de esta modalidad... Todos ellos coleccionan victorias en las citas gallegas. El pequeño Xoel, el último en incorporarse al grupo, ya se ha impuesto en dificultad en la segunda prueba de la Copa Gallega de Idade Escolar. Como heraldo, Xián, sexto en bloque en el Campeonato de España y tercero en velocidad en la Copa de España de la categoría sub 18.

Sorprenden el palmarés y la polivalencia. Solo madrileños y navarros, mejor dotados materialmente, los superan. “En Vigo no hay muchas instalaciones para el nivel que tenemos”, reflexiona Mara. A Lugo acuden cada dos meses o cuando se aproxima un campeonato de velocidad. “Pierdes tiempo y dinero en desplazarte. Son muchas dificultades”, lamenta Lucía. “Es un gasto grande”, conviene Xián.

“Nosotros estamos muy orgullosos de ellos”, proclama Fernando Fernández Rey, que revela que en A Coruña avanza un proyecto de rocódromo. “Y nosotros, sin instalaciones, siempre vamos destacando. Tiramos de cantera.Siempre hemos tenido buenos escaladores, pero eso no basta”. Eva López, madre de Xián, añade: “Con los pocos medios de que disponemos en Vigo, los resultados son espectaculares”. El secreto de tal prodigio lo aclara quizá el diminuto Xoel cuando explica por qué lo ha escogido como deporte: “Empecé escalando... Y seguí escalando”.

Compartir el artículo

stats