El club vigués está molesto con la posibilidad de perder un acuerdo en el que había depositado grandes expectativas, pero tiene también razones económicas de peso para preferir que sea el club londinense el que unilateralmente haga efectvios en un solo pago los 50 millones que le facultarían fichar a Maxi, rechazando los intereses que el equipo inglés le ofrece para fraccionar el fichaje del artillero uruguayo.

Si finalmente el West Ham se decide a abonar el importe de la cláusula de Maxi en la sede de LaLiga, el Celta podría ahorrarse tener que pagar al Defensor Sporting el 20 por ciento de los derechos de la futura de venta pactados con el club de origen del delantero cuando llegó traspasado a Vigo hace dos años. Existen precedentes legales que favorecen esta tesis, como el caso Keita, que enfrentó hace unos años al Sevilla y al Lens por el traspaso del centrocampista malinés al FC Barcelona.

Al igual que Defensor con Maxi, el club francés poseía el 10 por ciento de una futura venta de Keita cuando el club azulgrana se hizo con el jugador depositando su cláusula de rescisión en la Liga. El Sevilla se negó a pagar su porcentaje a Lens alegando que el fichaje de Keita no podía considerarse un traspaso, sino una indemnización por la rescisión de un jugador que el club nervionense no quería vender. El asunto acabó en los tribunales deportivos. Aunque la FIFA dio inicialmente la razón al Lens, el equipo andaluz recurrió ante el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) que falló a favor del Sevilla, que no tuvo que pagar al Lens el 1,4 millones que le reclamaba por el 10 por ciento de los 14 en que estaba fijada la cláusula de rescisión de Keita. Y el Celta podría ahorrarse cerca de nueve millones de euros del porcentaje de Defensor (el 20% se calcula sobre la plusvalía y hay que recordar que el club vigués pagó 4,3 millones de euros por él), si el West Ham hace efectiva en LaLiga la cláusula de Maxi Gómez.