El español Alberto Contador (Trek Segafredo), que ha quedado prácticamente descartado para luchar por las primeras posiciones de la Vuelta a España, ha asegurado que las sensaciones fueron "malísimas" desde la ascensión a la Rabassa, el penúltimo puerto del día. "Todo el día me costaba mucho ir y en la Rabassa con un compañero hemos decidido marcar un ritmo más tranquilo y esperar a que pasen los días", ha explicado.

El ciclista de Pinto ha calificado de "palo" haber perdido en la meta de Andorra más de dos minutos y medio con respecto a los primeros, pero ha vuelto a recordar que se encuentra en la Vuelta de su despedida como profesional y por eso, sea cual sea el resultado, pretende "disfrutarla al máximo".