Formoso acusa a la Xunta de dejar en el olvido a las víctimas del franquismo

El secretario general del PSdeG, Valentín González Formoso, participó esta mañana en Redondela en un homenaje a las víctimas del franquismo en el que acusó al gobierno de la Xunta de dejar en el olvido a los miles de represaliados y dar “la espalda” a sus familias que tienen la necesidad de “no olvidar la parte más oscura de la historia”. Durante el acto celebrado ante el monumento a los fusilados en el Alto da Concheira de Trasmañó, el dirigente socialista prometió “sensibilidad con la memoria democrática” cuando el PSdeG llegue a San Caetano.

“La Xunta actual, con Alfonso Rueda al frente, y antes con Feijóo, le dieron la espalda a esa necesidad del país de ser dignos con nuestra propia historia y dejaron en un cajón todas las políticas de memoria democrática”, indicó Formoso durante el Día de homenaje y recuerdo a las víctimas del golpe militar, la guerra civil y la dictadura franquista.

En el acto también intervinieron la alcaldesa de Redondela, Digna Rivas; la diputada socialista Paloma Castro, en representación de la ejecutiva provincial, y José Blanco “Bullo”, quien habló de la experiencia de represión vivida por su madre.

Fue en ese mismo lugar donde fueron fusiladas hasta 21 personas, entre ellas Manuel Lustres Rivas, periodista vinculado a FARO DE VIGO y comprometido con el impulso al Estatuto de Autonomía de 1936, al que Formoso destacó como “referente”.

Formoso afirmó que es una obligación de las generaciones actuales “dignificar nuestro pasado por las familias y por las propias víctimas”, que es lo que, en su opinión, no está haciendo la Xunta. “En Galicia se está ofendiendo la memoria de una buena parte de la sociedad y de historia de nuestro país”, dijo Formoso, para quien el Gobierno gallego “no mira hacia la dignidad” al ignorar las más de 500 fosas comunes que hay en la comunidad autónoma sin investigar”.

Rivas puso en valor a las mujeres de la isla de San Simón, conocidas como las “madriñas”, entre ellas la madre de José Blanco, que trabajaron a escondidas para ayudar a los más de 6.000 presos republicanos que estuvieron encerrados en la isla redondelana por la represión franquista.

Por su parte, la diputada Paloma Castro criticó que "al PP no le guste hablar de memoria porque tiene un nicho de voto que comparte con la ultraderecha" que "no quieren perder".