El tráfico vuelve a la normalidad en Baiona tras 3 meses de obras

Ya se puede circular por el tramo remodelado de Carabela Pinta y acceder también a Cidade de Vigo, que vuelve a cambiar de sentido

Peatones, ayer, por la recién remodelada Carabela Pinta, en la que tienen prioridad sobre los vehículos.

Peatones, ayer, por la recién remodelada Carabela Pinta, en la que tienen prioridad sobre los vehículos. / N.P.

Después de tres meses en obras para homogeneizarlo con la parte humanizada y semipeatonal, el tramo alto de al céntrica Rúa Carabela Pinta en Baiona reabrió ayer al tráfico, en la fecha exacta que había comprometido el anterior gobierno municipal a vecinos y empresarios del entorno, justo a tiempo de evitar el caos circulatorio que podría producirse en plena temporada alta de turismo. El tráfico rodado recupera así la normalidad en el centro urbano de Baiona, reorganizado en abril al cortar el vial al tráfico para desarrollar los trabajos.

Los vehículos no podían acceder ni a Carabela Pinta ni a Cidade de Vigo, excepto los residentes. Ahora los conductores pueden volver a circular exactamente como antes de las obras en las dos calles, por Cidade de Vigo en dirección a la travesía marítima.

Los vehículos vuelven a circular por la Rúa Carabela Pinta.

Los vehículos vuelven a circular por la Rúa Carabela Pinta.

Hosteleros y comerciantes del entorno celebraban ayer la reapertura después de una primavera “sitiados” por la maquinaria, el polvo y las vallas. Las terrazas volvieron a desplegarse por la vía, que no será peatonal por las tardes y fines de semana como en el tramo entre Cidade de Vigo y Elduayen, sino “de convivencia”. Es decir, los viandantes tienen prioridad y los vehículos deben circular a una velocidad muy reducida, de 10km/hora.

Las obras, además de embellecer la calle, incluyeron la sustitución de las tuberías de saneamiento, con red separativa de aguas fecales y pluviales, el soterramiento del cableado y la renovación del alumbrado. El presupuesto alcanzó los 266.091,10 euros. Queda pendiente el callejón de Huertas Reales, al que se le cambiará el pavimento de pizarra por granito, para después del verano.