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Un punto tranquilo en una carretera de alta siniestralidad

Dos motoristas perdieron la vida este año en el tramo de la carretera PO-552 entre Baiona y A Guarda, uno el 23 de mayo y otro el 6 de agosto. Y no son pocos los accidentes con heridos que se suceden en la vía cada pocos meses, pero el kilómetro 26, el punto en que tuvo lugar el accidente del autobús con los trabajadores de Citroën es uno de los tramos más seguros, según afirman desde el Concello y desde las fuerzas de seguridad. Presenta una curva abierta y un cambio de rasante, pero con gran visibilidad. No es un lugar en el que se recuerden siniestros graves. La fatalidad de la huida del caballo y la oscuridad de la noche se conjuraron en el vuelco del autocar. La Guardia Civil de Tráfico ha abierto una investigación para esclarecer los detalles de lo ocurrido.

La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade tiene reconocidos varios puntos negros de concentración de accidentes en dicho tramo, pero no en el lugar del siniestro ni siquiera en sus proximidades.

Hacía años que no se producía además un siniestro por un equino en la calzada. Era frecuente que los caballos salvajes que se crían en libertad en la Serra da Groba bajasen a las vías hasta la colocación de pasos canadienses por parte del Concello en puntos estratégicos para evitarlo.

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